La organización de derechos humanos Laboratorio de Paz presentó hoy el informe técnico Hoja de Ruta FFM para la Reconstrucción Democrática e Institucional de Venezuela, una sistematización inédita de 142 recomendaciones oficiales emitidas por la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos de la ONU (FFM) entre 2020 y 2025.
El documento, construido exclusivamente a partir de fuentes oficiales de Naciones Unidas, propone un plan secuencial de reformas para una futura transición democrática, articulado en seis ejes estratégicos: justicia y rendición de cuentas; cuerpos de seguridad y control civil; sistema judicial y Ministerio Público; órganos de control; libertades políticas y espacio cívico; y cooperación internacional.
“Este documento no es un programa de gobierno ni una propuesta partidista. Es una referencia técnica construida desde la sociedad civil para evitar improvisaciones y garantizar que una transición democrática en Venezuela incorpore verdad, justicia y garantías de no repetición desde el primer día”, señaló Laboratorio de Paz.
Pasos a seguir
El informe identifica tres conclusiones clave derivadas de los informes de la FFM:
- Existencia de crímenes de lesa humanidad cometidos por cuerpos de seguridad del Estado.
- Patrones sostenidos de represión con uso de tecnologías de vigilancia y detenciones arbitrarias.
- Colapso institucional del sistema de justicia, que ha facilitado la impunidad.
La hoja de ruta propone medidas concretas en tres fases:
- Primeros 100 días: liberación de detenidos arbitrarios, auditorías a cuerpos de seguridad, acceso irrestricto a centros de detención y ratificación de tratados internacionales.
- Primer año: desmontaje de estructuras represivas, reforma judicial, instalación de una Comisión de la Verdad y protección a periodistas y defensores.
- Años 2 a 6: leyes de reparación, profesionalización policial, autonomía judicial, cooperación con la CPI y agenda de memoria histórica.
El informe subraya que la transición solo será viable con acompañamiento internacional sostenido, asistencia técnica especializada y participación activa de víctimas y sociedad civil.
Laboratorio de Paz invita a actores sociales, políticos y académicos a debatir y enriquecer esta hoja de ruta, destacando que “Venezuela ya dispone de un mapa: lo que falta es voluntad y protección para poder recorrerlo”.











