La Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos sobre Venezuela publicó este miércoles en su informe, que encuentra “motivos razonables” para creer que los servicios de inteligencia SEBIN y DGCIM utilizaron detenciones arbitrarias contra opositores del régimen.
“En los casos investigados, varias personas detenidas también fueron víctimas de desapariciones forzadas de corta duración y de actos de tortura y tratos crueles, inhumanos o degradantes, incluida la violencia sexual y de género, a manos de las agencias de inteligencia SEBIN y DGCIM”.
En ese sentido, el informe dice que las detenciones arbitrarias fueron a personas “por su afiliación, participación, opiniones o expresión política”, a quienes también “interrogaron y torturaron o trataron inhumanamente”.
Violaciones por el SEBIN
La Misión investigó 33 casos ( 21 hombres y 12 mujeres) en los que se encontró motivos razonables para creer que El Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) “arrestó y/o torturó o maltrató arbitrariamente a personas por motivos políticos”.
El informe indicó que según las declaraciones de un exempleado del SEBIN, “las órdenes que determinaban quién sería investigado, a menudo venían de Maduro y de Diosdado Cabello. Las órdenes fueron entregadas al Director General del SEBIN, quien las transmitió a las direcciones operativas”.
“En varios casos investigados, los funcionarios/as del SEBIN utilizaron la fuerza o la violencia durante los arrestos, a pesar de que los testigos dijeron, o las grabaciones de vídeo mostraban, que las personas detenidas no eran violentas ni se resistían al arresto. Funcionarios/as del SEBIN ingresaron por la fuerza en las casas, derribando puertas o entrando por las ventanas”.
También se conoció que “en siete casos investigados, agentes del SEBIN perpetraron actos de violencia sexual o de género contra personas detenidas en un intento de obtener confesiones o información que implicara a otros, o de degradarlos, humillarlos o castigarlos”.
Violaciones por el DGCIM
La Dirección General de Contrainteligencia Militar está relacionada con 77 casos investigados por la ONU, donde se “detuvo y torturó a oficiales militares actuales, exmilitares y a civiles asociados a ellos”.
La misión indica que esta organización realiza las detenciones, durante el día ya sea en el lugar de trabajo o al convocarlo a una reunión en la que es detenido, sin orden de captura y sin dar motivo de la detención. Los arrestos se realizaron en diferentes puntos del país, y luego eran trasladados a Caracas, ya sea directamente a la DGCIM Boleíta o pasando primero por una de varias “casas de seguridad” no oficiales o clandestinas durante horas o días”.
“La Misión documentó 24 casos de tortura que tuvieron lugar en esas instalaciones entre 2018 y 2019. La Misión pudo identificar seis de esos sitios sobre la base de la información de las víctimas, los abogados/as, los familiares y las organizaciones, cuyos detalles figuran en el informe de sesión”.
“La Misión también ha examinado la información recibida del Foro Penal sobre 339 detenciones de personal militar y civiles asociados. De ellos, 187 siguen detenidos (dos han cumplido plenamente sus condenas), 61 cuentan con medidas sustitutivas y 41 han sido puestos en libertad (la situación del resto varía)”.