Tras casi siete meses de la guerra de Vladimir Putin contra Ucrania, Nicolás Maduro nuevamente se puso de su lado y exigió que sean levantadas las sanciones económicas y petroleras contra Rusia.
«Son sanciones irracionales, injustificadas, ilógicas, que han llevado al mundo a la llocura que hemos conocido durante estos seis meses, y que han colocado al mundo occidental, a Europa, a EEUU y al resto del mundo, en una situación de crisis peligrosa, riesgosa, para la estabilidad social, económica y política de esos países», afirmó durante un encuentro con el secretario general de la OPEP, Haitham Al Ghais, quien está de visita en Caracas.
Maduro consideró que las sanciones son una «guerra contra Rusia que Europa está condenada a perder en todos sus aspectos».
«Dicen por ahí que no hay peor ciego que el que no quiere ver. Pareciera que el peor ciego que no quiere ver son las élites de Europa y EEUU que se empeñan en las sanciones contra Rusia, que se empeñan en crear una crisis energética que impacta la economía, el comercio y la estabilidad del mundo», insistió.
El mandatario chavista calificó como «un suicidio económico de Europa» las medidas de presión contra el régimen de Vladimir Putin, y abogó por su flexibilización.
«Desde Venezuela, con la autoridad moral que nos da nuestra diplomacia de paz y ser fundadores de la OPEP, llamamos al mundo a la racionalidad y que se busquen los caminos de la diplomacia y la paz para estabilizar las incertidumbres y amenazas del mercado petrolero, del mercado energético y de la economía», afirmó.