El presidente de la Asamblea Nacional chavista, Jorge Rodríguez, advirtió este jueves que el régimen de Nicolás Maduro no firmará ningún acuerdo con la Plataforma Unitaria hasta que no sean levantadas todas las sanciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados.
«Venezuela no va a firmar ningún acuerdo con ese sector de la oposición venezolana hasta que este cien por ciento libre de sanciones, hasta que no se levanten las 765 medidas coercitivas unilaterales, firmadas por Donald Trump y Barack Obama», dijo Rodríguez.
El líder chavista afirmó que ha conversado en diferentes procesos de diálogo con al menos nueve oposiciones venezolanas. La última de ellas fue el proceso de negociación en México.
«Nosotros nos hemos sentado con todas las oposiciones, pero fíjense las consecuencias de esas conversaciones. Nosotros firmamos un acuerdo social en el mes de noviembre, con estos sectores de la llamada «Plataforma Unitaria», del sector que esta más a la derecha. Un acuerdo donde rescatábamos de manos de los secuestradores, 3200 de los 30 mil millones de dólares que nos tienen robados y secuestrados en los bancos extranjeros, para la salud, la educación, el agua, la electricidad, programas sociales junto a las Naciones Unidas», afirmó Rodríguez,
Asimismo aseguró la Administración Biden envió una carta a las Naciones Unidas, indicando que no pueden garantizar los recursos para el cumplimiento del acuerdo.
«Inmediatamente después que se firma el acuerdo social los Estados Unidos le manda una carta a Naciones Unidas que dice «EE. UU. no garantiza la seguridad de esos fondos y podemos ir contra ellos, por tanto la Naciones Unidas dijo en consecuencia no podemos instrumentar el Acuerdo Social, es decir, que no han cumplido con algo que teníamos tres meses discutiendo».
Aseguró que este incumplimiento se debe a que la oposición «no tiene palabra», lo que no ha permitido concretar lo acordado, es decir, la creación de un fondo fiduciario -manejado por Naciones Unidas- para canalizar partidas destinadas a aliviar el hambre, las enfermedades y otras necesidades en el país sudamericano.
Procesos de diálogo en Venezuela
En los últimos nueve años, en Venezuela han ocurrido diferentes procesos de diálogo para solventar la crisis política y económica que atraviesa el país, mucho antes de que se impusieran las sanciones contra el régimen de Maduro en el 2017.
El primer encuentro ocurrió en abril de 2014, cuando representantes de la oposición y el régimen se reunieron luego de la ola de protestas y represión en el territorio nacional, para encontrar una solución.
La cita ocurrió en el Palacio de Miraflores, donde dirigentes expresaron sus inquietudes en el ámbito político, económico y social.
La oposición dejó sus condiciones claras y entre ellas estaban: Ley de Amnistía, instauración de la Comisión de la Verdad Independiente, el compromiso para la renovación de los poderes públicos y el desarme de grupos paramilitares. No obstante, este intento de diálogo fracasó en mayo del mismo año.
El segundo intento fue en marzo de 2016, durante la activación del referéndum revocatorio contra Maduro.
La Mesa de la Unidad Democrática aceptó una primera reunión exploratoria en República Dominicana con el acompañamiento de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y los expresidentes de España José Luis Rodríguez Zapatero, de Panamá Martín Torrijo y de República Dominicana Leonel Fernández, pero una vez más el resultado no fue el esperado, sino hasta octubre de ese mismo año.
En está oportunidad se instalaron dos mesas de trabajo: la primera buscaba la paz, respeto al estado de derecho y a la soberanía nacional. La segunda se enfocaba en la verdad, justicia, derechos humanos, reparación de víctimas y reconciliación. La tercera se fundamentaba en el tema económico-social, y finalmente, la cuarta estaba dirigida a la generación de confianza y al establecimiento de un cronograma electoral. Pese a todo lo conversado, no se obtuvieron resultados.
El tercer encuentro fue en septiembre de 2017 de nuevo en República Dominicana, la oposición exigió elecciones libres y transparentes organizadas por un Consejo Nacional Electoral (CNE) equilibrado, la apertura de un canal humanitario, liberación de los presos políticos y la restitución de la independencia de poderes, pero terminó levantando en febrero de 2018 al no haber un acuerdo sobre fecha de elecciones presidenciales.
En 2019 sucedieron dos acercamientos, el primero entre el régimen y la Mesa de la Unidad Democrática que apoyaba a Juan Guaidó, y era auspiciado por el reino de Noruega, pero fue cancelado por la negativa de Maduro a retomar las conversaciones.
Sin embargo ese mismo día un sector minoritario de la oposición desligados de la MUD e integrado por el diputado Timoteo Zambrano, el exalcalde Claudio Fermín y el secretario general del Movimiento al Socialismo (MAS), Felipe Mujica, firmó en Barbados un acuerdo con el régimen que establece el retorno del chavismo al Parlamento, la renovación de autoridades electorales y la liberación de «presos políticos».
Finalmente en 2021 ocurrió el quinto acercamiento entre la oposición y el régimen, que se desarrolló en México hasta la deportación la extradición del empresario colombiano Álex Saab -presunto testaferro del presidente Maduro- a Estados lo que instó a la parte chavista a levantarse de la mesa hasta noviembre de 2022 cuando se firmó el acuerdo social.