El presidente de la Reserva Federal de EE.UU., Jerome Powell, aventuró este miércoles que las subidas de tipos del banco central van a ralentizarse «tan pronto como diciembre», insinuando así que el próximo aumento será de 0,5 puntos en lugar de 0,75 como los que se han aprobado en los últimos meses.
Durante un evento en la institución Brookings en Washington, Powell apuntó que la inflación continúa demasiado elevada para dejar de subir las tasas, y que el tipo de interés oficial deberá mantenerse elevado durante más tiempo del esperado.
«Me parece probable que el nivel definitivo de tipos deberá ser un poco más alto del que se incluía en nuestro resumen de predicciones económicas de septiembre», explicó.
En sus predicciones de septiembre, la Fed preveía mantener el tipo de interés oficial entre el 3,9 y el 4,6 % para finales de 2022 -actualmente se encuentra entre el 3,75 y el 4 %-, y entre el 3,9 y el 4,9 en 2023, para acabar con una horquilla de tipos de entre el 2,3 y 3 % a largo plazo.
En su discurso, Powell quiso restar peso a los datos económicos más recientes, que parecen indicar que la inflación en el país ha alcanzado su pico, y avisó de que los modelos llevan un año pronosticando que la inflación bajaría cuando en realidad ha seguido subiendo.
El máximo responsable de la Fed centró su intervención en el mercado laboral, que, en su opinión, continúa desacompasado -ya que hay más oferta de empleos que demanda.
Powell reincidió en sus comentarios de comienzos de noviembre, cuando el banco central anunció su cuarta subida consecutiva de 0,75 puntos de los tipos de interés, en los que dijo que todavía queda margen para devolver la inflación a su objetivo del 2 % sin provocar una recesión. En octubre, la tasa se situaba en el 7,7 % interanual.
El presidente de la Fed consideró que este margen es cada vez más estrecho, pero que sigue existiendo y que los recientes datos de empleo que muestran una bajada de la demanda de trabajadores son esperanzadores. EFE