La directora del Centro ucraniano para las Libertades Civiles, Oleksandra Matviychuk, cuya organización recibió el Nobel de la Paz el año pasado, pidió este jueves que se cree «ahora» el tribunal especial para juzgar a los líderes políticos y militares rusos por el crimen de agresión contra Ucrania y no esperar al fin del conflicto.
«En el siglo XXI debemos avanzar más. La Justicia debe ser independiente de la magnitud del poder del régimen de Putin. No podemos esperar. Debemos establecer un tribunal especial sobre el crimen de agresión ahora y exigir responsabilidades a Putin, (Alexandr) Lukashenko (presidente de Bielorrusia) y otros culpables de este crimen», dijo.
La abogada realizó esas declaraciones durante una intervención virtual en el pleno del Comité Económico y Social Europeo, donde reconoció que la creación del tribunal es un paso «valiente», pero aseguró que hacerlo es «lo correcto».
Contrastó su petición con lo que sucedió en el siglo XX, cuando los Juicios de Núremberg tuvieron lugar «después de que el régimen nazi hubiera colapsado».
«Necesitamos Justicia, porque esta cultura de impunidad, esta violencia y esta negación de la dignidad humana se convirtió en parte de la cultura rusa y tenemos que pararlo. Ya basta», expresó.
Recalcó que la invasión rusa de Ucrania no es un conflicto «entre dos Estados», sino «una guerra entre dos sistemas: el autoritarismo y la democracia».
«Putin intenta convencer al mundo de que la democracia, el Estado de Derecho y los derechos humanos son valores falsos. ¿Si son genuinos, por qué fracasan a la hora de defender a alguien? ¿Por qué no pudo todo el sistema de Naciones Unidas detener las atrocidades rusas?», se preguntó.
«¿Por qué yo, una abogada por los derechos humanos que ha estado aplicando la ley para defender a la gente durante muchos años, en la actualidad tengo que responder a la pregunta de cómo contribuir a la supervivencia de las personas en los territorios ocupados diciendo que proporcionen armas modernas a Ucrania? Porque, por ahora, la ley no funciona, aunque confío en que sea algo temporal», completó.
Precisó que Rusia utiliza los crímenes de guerra como parte de sus artes militares e «intenta romper la resistencia de la población y ocupar el país causando un enorme dolor a los civiles».
«No hay justificación militar para tales acciones. Los rusos hicieron esto solo porque podían», aseveró.
En este sentido, las autoridades ucranianas han registrado más de 71.000 casos de presuntos crímenes de guerra durante el primer año de invasión rusa, y han identificado a 276 sospechosos de diferentes delitos y emitido 26 sentencias, según contabilizó hoy Eurojust, que también puso en marcha una base de datos judicial para almacenar las pruebas.
Matviychuk constató que hay una «brecha en la rendición de cuentas» porque el sistema jurídico ucraniano está «sobrecargado» con «una cantidad extrema de crímenes de guerra», pero el Tribunal Penal Internacional, dijo, «restringe sus investigaciones solo a algunos casos seleccionados y no tiene jurisdicción sobre el crimen de agresión en términos de la agresión rusa contra Ucrania».
Al margen del crimen de agresión, la letrada recordó que existen los crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y genocidio.
«La lucha por la Justicia no debería limitarse solo al crimen de agresión«, manifestó, y pidió apoyo para poder investigar y juzgar los demás delitos.
También señaló que una paz «sostenible» es «imposible sin Justicia».
«Todo este infierno que afrontamos en Ucrania es resultado de la impunidad total que las tropas rusas han disfrutado en Chechenia, Moldavia, Georgia, Mali, Libia, Siria y otros países del mundo. Nunca han sido castigados por esto. Los rusos creen que pueden hacer lo que quieran«, denunció.
«Debemos romper el círculo de impunidad, no solo por los ucranianos y no solo por otra gente que sufrió la brutalidad rusa, sino por las personas que pueden convertirse en el próximo objetivo de la agresión rusa y evitarlo esta vez», expresó.
EFE