El secretario general del Consejo de Ministros de Haití, Renald Lubérice, renunció al criticar al primer ministro haitiano, Ariel Henry, que está siendo investigando en el marco del magnicidio del presidente, Jovenel Moïse, por no «colabora con la Justicia».
Con información de Europa Press y EFE
Lubérice anunció su dimisión en una carta enviada al Consejo de Ministros, en la que justificó su renuncia en las sospechas de que Ariel Henry pudiera estar implicado en el asesinato del presidente Jovenel Moïse, perpetrado el 7 de julio pasado.
“No puedo permanecer en la Secretaría General del Consejo de Ministros bajo la dirección de una persona nombrada por Jovenel Moïse que ha sido acusada en su asesinato, y que no tiene intención de cooperar con la Justicia”, ha indicado Lubérice en un comunicado que también ha compartido en su cuenta de Twitter.
El fiscal de Puerto Príncipe Bed-ford Claude pidió este martes acusar a Henry en el caso del asesinato de Moïse, algo que le valió la destitución del primer ministro bajo la justificación de “faltas administrativas graves”.
No obstante, la misiva en la que comunicaba la decisión estaba fechada el lunes 13 de septiembre, un día antes de que Claude prohibiera la salida de Henry del país, por lo que fuentes cercanas al primer ministro han señalado que esta medida quedaría sin efecto ya que se tomó de forma posterior a la destitución.
El fiscal sustentó sus sospechas en informes de una ONG que aseguran que Henry mantuvo dos conversaciones telefónicas con uno de los principales sospechosos de organizar el asesinato, Joseph Felix Badio, pocas horas después del crimen.
A pesar de las sospechas, el fiscal no estaba facultado para solicitar la investigación o la citación de ningún implicado, ya que el caso del magnicidio se encuentra en manos del juez de instrucción Garry Orélien, quien es la única autoridad con poder para conducir la investigación.
Algunos medios haitianos dijeron que Henry destituyó a Lubérice y también al ministro de Justicia, Rockefeller Vincent, en el curso del mismo Consejo de Ministros en el que cesó al fiscal, celebrado el lunes, pero esta información no ha sido confirmada de forma oficial.
El cese del ministro de Justicia era una de las exigencias que hicieron algunos partidos opositores como condición para firmar un acuerdo político, que fue suscrito el pasado sábado.
El acuerdo, firmado por el primer ministro y por varios partidos de oposición, prevé el aplazamiento de las elecciones y la formación de un nuevo Gobierno apartidista, que asumiría el poder hasta la cita con las urnas.