Los problemas financieros de la Organización Mundial de la Salud (OMS), causados en parte por la salida de Estados Unidos, antes su principal contribuyente, han obligado a reducir un 40 % sus fondos para emergencias en todo el mundo, reconoció este jueves la agencia.
«Más de 5.600 instalaciones sanitarias han tenido que reducir sus servicios en emergencias humanitarias, y más de 2.000 han suspendido sus operaciones», detalló en rueda de prensa la jefa de unidad para asistencia humanitaria y de urgencia de la OMS, Teresa Zakaria.
Zakaria subrayó que estos recortes han reducido el acceso a servicios sanitarios para 53 millones de personas, y recordó que algunos estudios científicos apuntan a que estos problemas financieros podrían causar hasta 14 millones de muertes evitables.
«Ya estamos viendo esto en países como República Democrática del Congo, Sudán o Haití, con un aumento en las tasas de mortalidad materna y de malnutrición», aseguró Zakaria.
«Estamos teniendo que hacer difíciles elecciones a la hora de ver a quién priorizar y a quién no entre los más de 300 millones de personas que habíamos identificado previamente como necesitadas de asistencia humanitaria», lamentó, al tiempo que subrayó que las organizaciones de ayuda a mujeres se han visto particularmente afectadas.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, añadió en la misma rueda de prensa que unos 50 países se han visto afectados por los recortes, y apuntó a que la agencia está considerando el cierre de oficinas nacionales en países de ingresos medios y altos.
EFE