El Gobierno español condenó «firmemente» la ejecución en Irán del ciudadano británico-iraní y exviceministro de Defensa Alireza Akbari, acusado de espiar para los servicios de inteligencia británicos, y convocó al embajador iraní en España para manifestarle su rechazo.
Así lo explica el Ministerio de Asuntos de Exteriores en un comunicado, en el que «una vez más, llama a las autoridades iraníes a poner fin a las ejecuciones y las condenas a muerte».
Exteriores reitera la posición contraria de España a este castigo, en todos los países del mundo y en todas circunstancias.
Akbari, quien ocupó el cargo de viceministro de Defensa durante el mandato del presidente reformista Mohamed Katami (1997-2005), fue condenado por un tribunal por «espiar para el MI6», el servicio de espionaje exterior británico.
Su ejecución se ha llevado a cabo este sábado a pesar de los llamamientos para que fuese detenida. EFE