El régimen de Nicolás Maduro exigió este miércoles a Chile «respeto a los derechos humanos» de los migrantes venezolanos que sean deportados desde la nación suramericana, cuyas autoridades anunciaron un reforzamiento de las medidas de seguridad para frenar la entrada irregular de personas por pasos clandestinos.
A través de Twitter, el ministro de Relaciones Exteriores del país petrolero, Yván Gil, señaló que ha sido «un clamor» de su nación «la exigencia de respeto a los DD.HH.» de sus «compatriotas», así como «la coordinación» junto con el Gobierno de Gabriel Boric en casos de deportaciones de venezolanos.
De momento, el régimen «no ha recibido solicitud de trabajo coordinado con el Gobierno de Chile respecto a supuestas deportaciones», aseguró el canciller.
Por su parte, la ministra de Interior chilena Carolina Tohá, acusó al régimen chavista de no cooperar en las deportaciones.
«Tenemos expulsiones que llevan meses tratando de ejecutarse y no hemos logrado coordinar los planes de vuelo para hacerlas efectivas; no puedes retener a una persona más de 48 horas antes de expulsarla», explicó.
Desde la localidad fronteriza de Colchane, epicentro de la inédita crisis migratoria que vive Chile, Boric manifestó que se debe trabajar en «una labor diplomática intensa, tanto con Bolivia como con Venezuela, para que reciban a los ciudadanos que sean deportados».
Con información de EFE