Estados Unidos acusó al régimen de Nicaragua de intentar intimidar a las instituciones financieras al bloquear las cuentas de los funcionarios nicaragüenses que han sido sancionados, y puso de ejemplo el caso del presidente ejecutivo del Banco de la Producción (Banpro), Luis Rivas.
El banquero Rivas, quien se encuentra detenido desde el 15 de junio pasado, fue acusado por el Ministerio Público de Nicaragua del delito de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional.
“El arresto del presidente ejecutivo de Banpro, Luis Rivas, por supuestamente incitar a la interferencia extranjera, parece un intento desesperado e inhumano de intimidar a las instituciones financieras que están cumpliendo con las sanciones internacionales”, indicó la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental de EEUU.
En el mensaje, enviado a la prensa por la embajada estadounidense en Managua, Washington consideró que con el arresto de Rivas, hace dos meses y medio, se “señaló que la represión radical del presidente (Daniel) Ortega iría más allá de la oposición y de sus críticos, y buscaría castigar a cualquiera que se haya cruzado con él y con la cleptocracia que ha establecido en Nicaragua”.
El banco bloqueó cuentas de sancionados
Sostuvo que el Banpro, que forma parte del grupo financiero Promerica y es “el banco más grande de Nicaragua, ha bloqueado cuentas de funcionarios del régimen sancionados por Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea”, y que Rivas, un economista de formación que ocupó cargos en la Administración del ex presidente nicaragüense Enrique Bolaños (2002-2007), “puede estar pagando el precio”.
Las sanciones internacionales han afectado a cerca de 30 empresas, funcionarios, allegados y familiares del presidente Ortega, entre estos su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, cuatro de sus hijos, además de su consuegro y director de la Policía, Francisco Díaz, y el titular del Parlamento, Gustavo Porras.
La Fiscalía acusó a Rivas junto a los ex guerrilleros sandinistas disidentes Hugo Torres y Víctor Hugo Tinoco, y la dirigente opositora Suyen Barahona, del delito de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional, de conformidad con los artículos 410 y 412 del Código Penal, en perjuicio de la sociedad nicaragüense y el Estado de Nicaragua.
Rivas forma parte de los 24 dirigentes políticos y profesionales independientes que han sido acusados por la Fiscalía en los últimos ocho días por los presuntos delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional o lavado de dinero.
Con información de EFE