La Corte Internacional de Justicia (CIJ) sentenció este miércoles que no hay pruebas de que, como asegura Rusia, se esté cometiendo un genocidio en Luhansk y Donestk, argumento utilizado por el régimen de Vladimir Putin para justificar su invasión en Ucrania.
En este sentido, y con 13 votos a favor y solo dos en contra, el máximo tribunal de Naciones Unidas ordenó a la Federación Rusa suspender de manera inmediata la operación militar en el territorio ucraniano.
La CIJ subrayó que Ucrania tiene un «derecho plausible» a no ser sometida a operaciones militares por parte de Rusia.