Durante el mes de septiembre se reportó la muerte de 18 niños y niñas en ocho comunidades del estado Miranda por causas asociadas a la desnutrición.
La cifra fue revelada en el más reciente informe de la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) sobre la situación de Venezuela.
El informe indica que 5.259 niños y niñas menores de 5 años fueron tamizados para la detección de la desnutrición aguda, de los cuales 5,3% fueron identificados con desnutrición aguda, 3,9% aguda moderada y 1,4% aguda severa.
Adicionalmente, de 1.970 mujeres embarazadas y lactantes tamizadas en diez estados, 22,2% presentó bajo peso y 51% presentó algún grado de anemia, según datos de Unicef.
Necesidades no cubiertas
En el informe la OCHA advierte que «no todo el personal de salud cuenta con cintas para la detección de la desnutrición aguda por perímetro braquial, lo que reduce la exposición y el contacto con los pacientes».
Además, se han reportado casos de desnutrición en localidades de difícil acceso como en los estados de Barinas, Bolívar, Carabobo, Delta Amacuro, Falcon, Lara, Miranda, y Táchira.
La falta de combustible sigue siendo una limitante importante para la movilización de asistencia humanitaria en todo el territorio nacional. Este escenario ha dificultado llevar la atención nutricional por los socios en el actual contexto del Covid-19, limitando el alcance de las visitas domiciliarias de seguimiento a casos de desnutrición.