Nicolás Maduro se pronunció este domingo sobre la extradición a Estados Unidos del empresario colombiano Álex Saab, señalado de ser su testaferro.
«Ayer tuvimos un día triste por la injusticia, por la indignidad, porque secuestraron a un hombre inocente, a un hombre limpio, a un hombre trabajador, un hombre que lo que ha hecho es amar al pueblo de Venezuela. Fue un día triste y de indignación porque el imperio norteamericano, violando el derecho internacional, se llevó secuestrado a un diplomático venezolano. Es el segundo secuestro», dijo en transmisión por VTV.
Maduro insistió en asegurar, sin pruebas, que Saab fue torturado en Cabo Verde, y afirmó que «estuvo a punto de morir».
«Se lo llevaron a una cárcel cochina, insalubre, y lo metieron bajo la oscuridad en un hueco lleno de excrementos, de ratas.como la peor película de terror. Y miembros del gobierno de EEUU lo torturaron durante largos días, a golpes, le partieron tres muelas, le metieron electricidad durante días y días», indicó.
Ante la extradición a Estados Unidos, Maduro informó que su régimen está haciendo gestiones ante organismos de derechos humanos en Ginebra.
«La lucha por la libertad de Álex Saab continúa y más temprano que tarde lo lograremos, la justicia y la verdad prevalecerá», señaló.
Maduro ratificó la decisión de suspender la participación de su delegación en la negociación que se desarrolla en México con la mediación de Noruega.
«El gobierno de EEUU sabía que secuestrando a Álex Saab le metía una puñalada mortal a los diálogos de México. Lo sabía y actuó. No quieren diálogo, no quieren paz para Venezuela», aseveró.