El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) denuncia que durante el mes de diciembre se han ejecutado traslados irregulares y arbitrarios de presos políticos desde los centros de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) La Yaguara y del Centro de Control y Resguardo de Detenidos de Boleíta, antigua Zona 7, en Caracas.
«Estos traslados se han efectuado de manera irregular y arbitraria, vulnerando lo establecido en la legislación venezolana. El Código Orgánico Penitenciario, en su artículo 125, establece que en el caso de personas procesadas los traslados a otros centros de reclusión deben contar con autorización expresa del juez de la causa; mientras que en el caso de personas penadas, debe notificarse al tribunal de ejecución correspondiente. Ninguno de estos procedimientos se ha cumplido«, señala la ONG en su página web.
«Consideramos que la ejecución de estos traslados en vísperas navideñas constituye un acto profundamente inhumano, en una época del año en la que las personas privadas de libertad esperan recibir visitas especiales de sus seres queridos, muchas de las cuales ahora resultan imposibles por razones económicas y logísticas«, insiste la ONG.
Advierte que estas reubicaciones, realizadas de forma sorpresiva e inconsulta, someten a las personas a un posible aislamiento bajo el pretexto de un «período de adaptación», a pesar de que muchos llevan meses o años en cautiverio.
Destaca que los internos ingresaron a los nuevos recintos sin objetos personales, lo que obliga a sus familias a costear uniformes, colchonetas y artículos de aseo en un contexto de precariedad económica, agravando el impacto psicológico del encierro y restringiendo el contacto con su entorno.













