El Partido Comunista de Venezuela (PCV) no participó en la sesión de la cuestionada Asamblea Nacional chavista, que aprobó este martes la salida de Venezuela de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
El diputado Oscar Figuera aclaró que la organización no acompaña esta decisión promovida por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y apoyada por unanimidad de las organizaciones agrupadas en la denominada Alianza Democrática, que integran políticos acusados de recibir sobornos del régimen.
«No somos ingenuos; sabemos que el sistema de Naciones Unidas tiene claras parcialidades políticas, pero para nadie es un secreto que en Venezuela se violan derechos humanos, políticos y sociales y esta decisión de la Asamblea Nacional no va a poder ocultar las gravísimas violaciones contra la Constitución que ejecuta la administración de Nicolás Maduro», declaró Figuera.
La Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU ya había sido expulsada del país en 2024 pero a finales de año se permitió que un funcionario regresara al país. El pasado viernes, desde Ginebra se presentó un informe en el que se documenta el deterioro de los derechos humanos durante el último año, especialmente después de las elecciones presidenciales de julio de 2024.
«Las maniobras de la cúpula del PSUV y sus partidos satélite en la Asamblea nacional confirma la senda autoritaria que ha adoptado. No pueden calificadas de soberanas y mucho menos antiimperialistas, decisiones que intentan ocultar las detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas de cientos de trabajadores, estudiantes, dirigentes políticos, sociales y sindicales», afirmó el diputado comunista.