La Federación Venezolana de Maestros y sus 27 sindicatos filiales, fijaron posición en cuanto «al irresponsable» llamado al inicio del año escolar 2020-2021 por parte del Ministerio del Poder Popular para la Educación.
Dicha organización, denunció, en un comunicado, que su sueldo representa «menos de 2 dólares quincenales, lo que nos sitúa en el rango de pobreza extrema, según lo que establece la Organización de las Naciones Unidas». «Sin salario decente, no habrá trabajo docente», exclaman.
“El docente tiene un salario de hambre, gana menos de 1.600.000 bolívares mensuales, que no le alcanza ni siquiera para comprar 2 Productos de la canasta alimentaria en la quincena, para tener un mínimo de calidad de vida».
Por último, la organización instó a los educadores a «no participar en ningún tipo de actividad que amerite salir de sus hogares, y poner en riesgo sus vidas exponiéndolas al contagio del Covid-19».
El regreso a clases
La Federación explicó que aprobar la modalidad semipresencial es una «franca violación al derecho a la vida de los estudiantes, educadores, padres y representantes», por lo que exponen iniciar clases desde casa para no interrumpir el aprendizaje de niños y adolescentes.
Asimismo, destacó que a pesar de que muchos países han restablecido las actividades educativas, aplicando las recomendaciones de la UNESCO, «en Venezuela constituye un hecho notorio, público y comunicacional que el Estado, no tiene capacidad para dar respuesta a la crisis sanitaria de vieja data profundizada con la pandemia de COVID-19, mucho menos para cumplir estas recomendaciones».
«Las propuestas que se promueven desde el Ejecutivo Nacional en materia educativa, están cargadas de improvisación y una exagerada dosis de falsedad para aparentar normalidad», revela el comunicado.