El exgobernador del estado Zulia, Manuel Rosales, lideró este sábado una jornada social de distribución de material preventivo contra el COVID-19 en el Barrio El Modelo de la parroquia Venancio Pulgar de Maracaibo.
Rosales recorrió varios kilómetros del oeste marabino, donde denunció el deplorable estado calles, casas y servicios públicos de la localidad. “Maracaibo es una ciudad hundida en el abandono y la basura”, señaló.
Aseveró que “el oeste de Maracaibo se ha convertido en ruinas, donde la tragedia que vive Venezuela se crece con más fuerza, donde la crisis eléctrica, del agua y carencia general de servicios gobiernan el Zulia junto al hambre y miseria impulsada por el régimen y sus representantes en el estado”.
Señaló, además, que el pueblo está sufriendo por la falta de gas doméstico, electricidad, agua, gasolina, recolección de desechos sólidos, drenajes abandonados, servicios de salud y red de cloacas, ausencia de transporte y alto costo de la vida.
Manuel Rosales afirmó que “el Zulia es un reflejo de la devastación que ha sufrido Venezuela a manos del régimen y los malos gobernantes que por desgracia le dirigen”.
Rosales aseguró que «los zulianos exigen que sus necesidades sean atendidas, es por esto que seguimos luchando y construyendo alternativas que nos conduzcan al cambio para acabar el sufrimiento y calamidad de la gente».
Por último, manifestó que la crisis eléctrica sigue dando muestras de su progresivo deterioro, “todos los días hay bajones de luz y cortes eléctricos que agravan el padecimiento de niños, ancianos y de los miles de pacientes con COVID -19 que son atendidos en sus hogares por la crítica situación de nuestros centros de salud ”.