Tras conocerse que el periodista y preso político Roland Carreño padece COVID-19 con severas complicaciones pulmonares y una prolongada crisis hipertensiva, el dirigente de Voluntad Popular, Cristofer Correia catalogó de irresponsable el manejo del caso por parte de las autoridades del régimen.
Correia denunció la indiferencia con la que asumieron las reiteradas peticiones y advertencias de los abogados defensores, quienes tenían más de 15 días solicitando su traslado a un centro de salud.
«Llevan 15 días advirtiendo que a Roland Carreño le dio una crisis hipertensiva y se pidió su traslado a un centro de salud. La irresponsabilidad los llevó a negarle la atención médica durante todo este tiempo. Cuando tardíamente fue trasladado, le diagnostican COVID-19 con complicaciones importantes, quién sabe desde cuándo está positivo. En este caso reina la indiferencia«, reclamó.
Correia hizo especial énfasis en que «la Constitución en su artículo 83, reconoce la salud como derecho social fundamental y establece la obligación del Estado de garantizarlo a todas las personas, sin distinción alguna, como parte del derecho a la vida». A la vez que lamentó el incumplimiento de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y «evidentemente» del debido proceso, «sobre todo en el caso Carreño».
Para Cristofer Correia, Roland Carreño no debería pasar por «semejantes atrocidades», en primer lugar porque ni él, ni los cientos de presos políticos deberían estar tras las rejas por pensar distinto.
«Presos deben estar los que cometen delitos, los que alimentan la corrupción, los que roban libertades, los que cometen fraudes. Es lamentable que Roland tenga que pasar por esta situación, en primer lugar porque ni él, ni ninguno de los otros cientos y cientos presos de conciencia deberían estar en un calabozo», cuestionó.