El canciller del gobierno interino de Venezuela, Julio Borges, aseguró que la muerte del preso político indígena Salvador Franco, quien falleció el domingo luego de que se le negara la atención médica en una cárcel del régimen de Maduro, demuestra que el dictador le declaró la guerra a los pueblos indígenas.
En ese sentido, hizo un llamado a la comunidad internacional a no ser espectadora de esta tragedia y tomar acciones para prevenir más muertes inocentes.
“La muerte de Salvador Franco es responsabilidad de la dictadura, le negaron la atención médica pese a que conocían que padecía un cuadro de salud muy delicado. Fue torturado por el régimen, le habían diagnosticado anemia y bajo conteo de plaquetas. Su caso demuestra que Nicolás Maduro les declaró la guerra a los pueblos indígenas”, sostuvo.
Además, Borges destacó que «Maduro ha causado el peor ecocidio del planeta en territorio de los pueblos originarios, los ha sometido a la más grave crisis humanitaria y no conforme con ello, los persigue y asesina, o bien por omisión como ocurrió con Salvador Franco, o bien por la acción de grupos narcoterroristas que ejercen el control de los territorios”.
El representante de la política exterior del gobierno interino señaló que existen otros 300 presos políticos en riesgo de muerte por las condiciones de reclusión y las torturas a los que son sometidos.
“Los presos políticos, civiles y militares, están en riesgo de muerte. Son víctimas de torturas por parte de agentes cubanos y esbirros del régimen, y están en unas condiciones de reclusión muy precarias. Es necesaria la acción de la comunidad internacional para frenar esta tragedia de la dictadura”, finalizó.