Armando Benedetti, embajador de Colombia en Venezuela culminó este martes 19 de julio sus funciones como representante del gobierno de Gustavo Petro, luego de presentar a comienzos de junio su renuncia, tras estar involucrado en el escándalo del niñeragate.
«En mi último día como embajador de Colombia en Venezuela, quiero reiterar mi cariño a los ciudadanos venezolanos y los esfuerzos que adelanté, con diferentes autoridades, para mostrar la inclemencia de las sanciones económicas que no han servido en ninguna parte del mundo,» afirmó el colombiano en su cuenta de Twitter.
Benedetti aseguró que durante su gestión se reestablecieron las relaciones bilaterales entre ambas naciones, se firmaron convenios de aranceles, incrementando las exportaciones. Se retomaron los vuelos y el transporte terrestre, se disminuyó el precio de la urea, se logró la cooperación judicial
El caso Benedetti-Sarabia
Sarabia era la mano derecha de Benedetti cuando fue senador y llegó con él a la campaña presidencial de Petro, siendo ambos dos piezas fundamentales para la victoria del candidato izquierdista.
De hecho el presidente la convirtió en su sombra cuando llegó a la Casa de Nariño y durante diez meses fue la mujer más importante del país.
Sin embargo, en mayo pasado se conoció por la prensa un posible caso de abuso de poder cometido contra su exniñera Marelbys Meza, acusada del robo del maletín con una suma no precisada de dinero de la casa de la alta funcionaria y quien fue llevada al palacio presidencial para ser interrogada.
Días después se supo que se había ordenado la interceptación ilegal de llamadas de Meza y de otra empleada. Además, el pasado 9 de junio se suicidó el teniente coronel Óscar Dávila, que supuestamente tuvo que ver con el interrogatorio ilegal a Meza.
Pero el caso se volvió más oscuro cuando la prensa reveló los audios que Benedetti le envió a Sarabia donde con un tono vulgar y amenazante le pedía un puesto más importante en el gabinete y le amenazaba con revelar secretos que podían enturbiar tanto a ella como a Petro.
En uno de esos audios, Benedetti reclamó a Sarabia mejor trato del Gobierno alegando que él gestionó 15.000 millones de pesos (unos 3,4 millones de dólares o 3,6 millones de euros) para la campaña de Petro y dijo que si contara quiénes la financiaron en la costa atlántica, «nos hundimos todos, nos acabamos todos, nos vamos presos».
Sarabia ya ha declarado ante la Fiscalía como víctima del robo, donde, según Caracol Radio, dijo que el maletín contenía 7.000 dólares -supuestamente de viáticos internacionales- y documentos de seguridad nacional, que es por lo que se procedió con el interrogatorio en dependencias presidenciales.
Mientras tanto, el aún embajador de Colombia en Venezuela -aunque Petro anunció su dimisión el 2 de junio- no acudió hoy a la cita en el CNE y envió una carta alegando su «voluntad de ejercer el derecho fundamental a guardar silencio».
«De acuerdo con la información de la prensa, estoy siendo investigado penal y disciplinariamente por los mismos hechos que ustedes adelantan esta investigación; por lo que, dado el alcance de esta garantía constitucional, haré uso de mi derecho a guardar silencio», señaló Benedetti en su penúltimo día como embajador.
En mi último día como embajador de Colombia en Venezuela, quiero reiterar mi cariño a los ciudadanos venezolanos y los esfuerzos que adelanté, con diferentes autoridades, para mostrar la inclemencia de las sanciones económicas que no han servido en ninguna parte del mundo.
— Armando Benedetti (@AABenedetti) July 19, 2023
5. Disminución en el precio de la tonelada de urea, de gran beneficio para el agro colombiano.
6. Cooperación judicial para adelantar los trámites de connacionales que requieren asistencia jurídica
7. Operaciones conjuntas entre Ministerios de Defensa contra el narcotráfico.— Armando Benedetti (@AABenedetti) July 19, 2023