El Partido Comunista de Venezuela (PCV) criticó este martes que Nicolás Maduro mantenga una «política complaciente» con el sector empresarial, «en detrimento de la clase trabajadora».
«El Gobierno de Nicolás Maduro solo le da noticias favorables al empresariado, a la élite política del país, y no tiene nada que decir, y mucho menos una política coherente que ofrecer, a la clase trabajadora», expresó Neirlay Andrade, integrante del comité central del PCV, según una nota de prensa de la organización.
La líder comunista cuestionó que el «menguado ingreso» de la clase trabajadora «se pierda a través del pago de infames tributos», entre los que mencionó el Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF), que grava con un 3 % las transacciones en divisas, usadas con frecuencia en el país ante la constante devaluación de la moneda local, el bolívar.
Este impuesto «termina pechando a las familias», aseguró Andrade, quien criticó también que no haya «anuncio alguno para revertir las políticas que han liquidado» las retribuciones de los trabajadores, cuyo salario mínimo equivale a 4,4 dólares al mes, cuando el costo de la canasta básica de alimentos -calculada para una familia de cinco personas- supera los 500 dólares, según estimaciones independientes.
El líder chavista adelantó este lunes que espera reunirse con el empresario Adán Celis Michelena, nuevo presidente de Fedecámaras, la mayor patronal del país, «apenas asuma su cargo», con el objetivo de «conversar de los planes para el desarrollo económico» de la nación.
Maduro, quien saludó la reciente designación de Celis Michelena, respaldó la petición de la gremial empresarial de poner fin a las sanciones que pesan sobre Venezuela, donde -aseguró el mandatario- existe un consenso «poderoso» contra estas medidas internacionales, especialmente las impuestas por Estados Unidos.
EFE