El presidente ruso, Vladímir Putin, promulgó hoy una ley que impone multas de hasta 30.000 rublos (unos 330 dólares) por no presentarse en la oficina de reclutamiento tras recibir la respectiva citación.
La medida, publicada en el portal de información legal, entrará en vigor el 1 de octubre próximo.
De esa forma, al no presentarse en un centro de alistamiento sin justificación, los hombres en edad militar tendrán que pagar entre 10.000 (110 dólares) y 30.000 rublos.
Hasta ahora la multa en estos casos oscilaba entre los 500 y 3.000 rublos (unos 5-32 dólares).
La norma prevé también cuantiosas multas para los empleadores que no presentan ante el correspondiente órgano militar la lista de sus empleados en edad militar.
Rusia aprobó previamente una ley que prohíbe a los llamados a filas abandonar el país desde el día de la recepción de la citación militar o su publicación en un registro electrónico.
Además, en caso de que el afectado no acuda al centro de alistamiento durante unos días, se le restringirá provisionalmente la posibilidad de abrir un negocio, el permiso de conducir, comprar inmuebles o solicitar un crédito bancario.
Según los diputados rusos, estas leyes buscan corregir los numerosos errores cometidos durante la movilización del septiembre pasado, la primera decretada por el Kremlin desde la Segunda Guerra Mundial.
Mientras, según muchos medios, el objetivo es impedir la repetición del éxodo de cientos de miles de rusos que se produjo en septiembre pasado cuando unos 300.000 rusos fueron llamados a filas para combatir en Ucrania.
EFE