Un grupo de mujeres y activistas afganas ha vuelto a salir a las calles de la capital del país, Kabul, para pedir su inclusión en el futuro gobierno de los talibán y el respeto de sus derechos, aunque en esta ocasión se han registrado incidentes con el grupo insurgente, que aseguran les han impedido el paso.
La manifestación ha tenido lugar después de que ya se registraran protestas en la ciudad de Herat y en Kabul por el mismo asunto, mientras los insurgentes continúan esbozando su ejecutivo, del que ya han avanzado, no obstante, que “podría” no haber mujeres en puestos prioritarios.
En esta ocasión, la manifestación ha acabado con enfrentamientos después de que los talibán no dejaran avanzar a la comitiva de mujeres y las rociaran con gas lacrimógeno, según la cadena de televisión afgana Tolo News.
Las mujeres y activistas han insistido en que su papel en el nuevo gobierno debería ser significativo. Los talibán han prometido que las mujeres no perderán derechos, o al menos no retrocederán a la irrelevancia que tenían en 2001, durante la anterior etapa del conocido como Emirato Islámico. Sin embargo, han dejado claro que la “sharia” o ley islámica será la línea roja que tendrán en cuenta.
La comunidad internacional, con Naciones Unidas a la cabeza, ha pedido que se respeten también los derechos de todos los sexos. La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Pramila Patten, advirtió esta semana de que la incorporación de mujeres en la futura administración será una “prueba de fuego” para constatar el verdadero compromiso de los talibán con los derechos y las libertades.
Estados Unidos alertó que mujeres y niñas que fueron evacuadas de Afganistán fueron obligadas a casarse antes de huir
Las autoridades estadounidenses encargadas de registrar a los refugiados afganos que llegan al país han alertado de que se han producido casos de matrimonio forzoso que afectan a las mujeres y niñas que han sido evacuadas de Afganistán.