El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, acusó al secretario general de la ONU, António Guterres, de haber sucumbido a la presión de Occidente al hacer declaraciones sobre la situación en el este de Ucrania que «no corresponden a su estatus».
«Para nuestro gran pesar, el secretario general de la ONU (…) fue objeto de presiones de Occidente e hizo varias declaraciones el otro día sobre lo que está sucediendo en el este de Ucrania que no se corresponden con su estatus y sus poderes bajo la Carta de la ONU», sostuvo Lavrov al inicio de su reunión con el enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen.
El jefe de la diplomacia rusa afirmó que «en cualquier conflicto, incluso con respecto al sirio, la Secretaría de la ONU está obligada a observar la imparcialidad y siempre está obligada a abogar por el diálogo directo entre los países en conflicto».
Sin embargo, consideró que Guterres «nunca ha alzado la voz a favor de la necesidad de cumplir con los requisitos de Acuerdo de Minsk (para la paz en el Donbás) apoyado por la resolución del Consejo de Seguridad 2202, que exige directamente resolver todos los problemas mediante el diálogo entre Kiev, Donetsk y Luhansk».
«Nadie en Occidente ha mencionado nunca esto y, lamentablemente, el secretario general siguió estos tristes ejemplos», dijo Lavrov.
Pedersen defendió a Guterres al recalcar que éste «expresó su preocupación por la reciente decisión del Gobierno ruso con respecto a las dos autoproclamadas repúblicas y también hizo una llamada a la desescalada, al diálogo, así como a una solución pacífica a esta crisis basada en los principios de la Carta de la ONU», recalcó.
«Espero -y él mismo se esfuerza por ello- que pueda contribuir al logro de estos objetivos», dijo Pedersen.
Recordó que el secretario general de la ONU «enfatizó el apoyo continuo de la ONU a principios tales como la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, con estricto apego a los principios de la Carta de la ONU y las resoluciones relevantes de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU».
Además, el enviado especial de la ONU para Siria expresó su preocupación por que «tal desarrollo de acontecimientos (alrededor de Ucrania) pueda tener un impacto negativo en la resolución del conflicto en Siria. Espero que esto no suceda», enfatizó Pedersen.
Con información de EFE