Rusia volvió a atacar la madrugada de este miércoles con drones tanto la capital del país, Kiev, como la infraestructura portuaria e industrial de la región de Odesa, a orillas del Mar Negro, y aunque ha ocasionado algunos daños no ha habido víctimas en ninguno de los dos casos.
«Por la noche, el enemigo dirigió el ataque de vehículos aéreos no tripulados al sur de la región de Odesa y como consecuencia del ataque se produjeron incendios en las instalaciones de la infraestructura portuaria e industrial de la región», dijo el gobernador regional de Odesa, Oleh Kiper, en su canal de Telegram.
El ataque, según el gobernador, se produjo a las 05.30 hora local (02.30 GMT) y hasta el momento «no se han reportado víctimas».
La agencia de noticias Ukrinform, que cita al mismo gobernador, dijo que como resultado de los ataques «se produjeron incendios en las instalaciones del puerto y la infraestructura industrial».
Desde que abandonó el acuerdo del grano, Rusia ha estado atacando las infraestructuras portuarias ucranianas.
Por otra parte, los rusos lanzaron también esta madrugada (02.20 hora local, 23.20 GMT del martes) un ataque contra la región de Kiev con drones de fabricación iraní, informó el jefe de la administración militar de la ciudad, Serhii Popko.
Posteriormente, el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko, comunicó que los restos de uno de los drones iraníes cayeron sobre un edificio no residencial del distrito de Solomyan, y que se había escuchado una explosión en otro distrito de la ciudad.
En ninguno de los dos casos se informó de víctimas.
EFE