Las autoridades peruanas cambiaron su sistema de alerta ante el fenómeno climático de El Niño Costero de «no activo» a «vigilancia», ante el incremento de la temperatura de las aguas del océano Pacífico y la predicción de lluvias fuertes en la costa y sierra del norte y centro del país.
La decisión fue tomada por la Comisión Multisectorial Encargada del Estudio Nacional del Fenómeno «El Niño» (Enfen) que detalló en un comunicado que se «estima que es más probable que ocurra El Niño costero a que no ocurra».
Detalló que se denomina «El Niño costero» al período en el cual se presentan durante tres meses «las anomalías mensuales de la temperatura superficial del mar» con «condiciones cálidas» mayores a las habituales.
Al respecto, el Enfen sostuvo que «existe una mayor probabilidad de que continúe el calentamiento anómalo observado entre lo que resta del verano y, por lo pronto, hasta mediados de otoño de 2023» debido a la evolución de las condiciones «océano-atmosféricas en el extremo del Pacífico ecuatorial oriental».
Esto incluye, indicó, «la zona norte y centro del mar peruano, y el pronóstico de ondas Kelvin cálidas que arribarían entre marzo y mayo» a las costas peruanas.
En concreto, las temperaturas superficiales del mar podrían alcanzar valores superiores a 27 grados y 26 grados en marzo y abril próximo, respectivamente.
Asociado a este calentamiento se espera que «se presenten episodios de lluvias de moderada a fuerte intensidad especialmente en marzo» en la costa norte y centro del país, además de la sierra norte y centro occidental.
El organismo agregó que para la región del Pacífico central la mayoría de los modelos internacionales «estiman una mayor probabilidad de que las condiciones neutras se mantengan hasta mayo y que ocurra luego una transición a condiciones cálidas».
«Se recomienda a los tomadores de decisiones tener en cuenta los posibles escenarios de riesgo de acuerdo con el pronóstico estacional vigente para fines de prevención y reducción del riesgo de desastres», remarcó.
El Enfen indicó que continúa «monitoreando e informando sobre la evolución de las condiciones oceánicas-atmosféricas y actualizando las perspectivas» y que emitirá un nuevo comunicado el 16 de marzo próximo. EFE