El fabricante de juguetes Lego anunció este martes que dejará de vender sus productos en Rusia por la invasión de Ucrania.
La compañía danesa es una de las últimas que han anunciado que abandonan el mercado ruso, como ya lo han hecho McDonald’s, Nike, Ikea, Google, Apple, IBM, Renault, KFC, Pizza Hut, entre otras.
La salida de empresas internacionales de Rusia se ha notado ya en el mercado de trabajo, aunque Moscú insiste que los niveles de desempleo son estables con unos 673.000 parados registrados en mayo.
Según dijo el pasado 13 de mayo el ministro ruso de Trabajo y Protección Social, Antón Kotiakov, en total ya son 138.000 los trabajadores que se encuentran de vacaciones forzosas debido al impacto de las sanciones y la retirada de empresas internacionales del mercado ruso.
Además, unos 131.000 empleados se vieron obligados a trabajar a tiempo parcial, agregó