El Comando de Operaciones Militares, controlado por los rebeldes sirios que han derrocado al régimen de Bachar Al Assad, anunció este miércoles el levantamiento del toque de queda en Damasco y sus alrededores, impuesto hace tres días.
En un comunicado publicado en sus redes sociales el mando castrense informó de esa medida e instó a los ciudadanos a regresar a sus puestos de trabajo y a las instituciones para contribuir «a la construcción de la nueva Siria».
Tras tomar el control de la capital, los insurgentes impusieron desde el domingo pasado un toque de queda entre las 16.00 y las 05.00 horas local sin precisar cuánto iba a durar.
Según se pudo constatar la restricción se ha cumplido durante estos días, pero poco, ya que pese a que se reducía la actividad cuando comenzaba el toque de queda, el tráfico de vehículos seguía siendo fluido.
En los barrios apartados del centro, algunos restaurantes de comida rápida se han mantenido abiertos hasta después del comienzo del toque de queda, lo que no ha ocurrido en las zonas céntricas.
Anoche, se pudo oír en algunas partes disparos al aire celebratorios y había gente festejando la caída del régimen de Al Asad en sus automóviles.
El toque de queda fue una de las primera medidas tomadas por los rebeldes en la ciudad después de que pidieran respeto por la propiedad pública y privada, así como no disparar.
Los rebeldes declararon Damasco «libre» del régimen de Bachar al Asad tras doce días de ofensiva iniciada por una coalición liderada por el grupo islamista Organismo de Liberación del Levante junto a otras facciones respaldadas por Turquía.