El índice de precios al consumidor (IPC) en Argentina se situó en junio pasado en el 39,4 % interanual, su decimocuarta desaceleración consecutiva, informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En el sexto mes de 2025, los precios al consumidor crecieron un 1,6 % en comparación con mayo, lo que implicó una leve aceleración con respecto a la tasa mensual del 1,5 % que se había registrado en el mes anterior.
Tras la súbita devaluación del peso argentino dispuesta por el Gobierno de Javier Milei apenas iniciar su mandato, en diciembre de 2023, y el impacto de sus primeras medidas ultraliberales, la inflación se disparó a una tasa mensual del 25,5 % en el último mes de 2023 y una variación interanual del 289,4 % en abril de 2024.
Pero a mediados del año pasado los precios iniciaron una tendencia descendente en Argentina como resultado de un fuerte ajuste fiscal y monetario y un derrumbe del consumo que aplastó la demanda.
De acuerdo con el informe oficial difundido este lunes, los precios de los bienes tuvieron el mes pasado una variación positiva del 0,8 % en comparación con mayo, mientras que los servicios subieron un 3,2 %, unos datos que ascienden al 30,1 % y el 63,6 %, respectivamente, en la comparación interanual.
Entre las subidas mensuales registradas en junio destacan las de educación (3,7 %) y gastos de vivienda, agua y electricidad (3,4 %).
Las menores variaciones se dieron en alimentos y bebidas no alcohólicas (0,6 %) y prendas de vestir y calzado (0,5 %).
Según el informe del Indec, la inflación argentina acumuló en el primer semestre del año un alza del 15,1 %.
Los precios al consumidor acumularon en 2024 una subida del 117,8 % en Argentina, por debajo del alza del 211,4 % de 2023.
Los más recientes pronósticos privados que recaba mensualmente el Banco Central argentino apuntan a que la inflación será este año del 27 %, con tasas mensuales del 1,7 % en julio y el 1,6 % en agosto. EFE