El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró este domingo el estado de emergencia para Nueva York y Connecticut y ordenó la asistencia federal que solicitaron para enfrentar la emergencia como resultado del paso de la tormenta Henri por la costa noreste del país.
Henri se dirigía como huracán categoría 1 al noreste pero sus vientos perdieron fuerza durante la noche y fue declarado tormenta. Continúa su ruta hacia Nueva York con vientos máximos sostenidos de 70 millas por hora (110 km/h), según el Centro Nacional de Huracanes.
Sin embargo, Henri continua siendo una amenaza para la población por las marejadas ciclónicas, inundaciones repentinas y vientos destructivos.
“Se espera que Henri toque tierra en el sur de Nueva Inglaterra o en Long Island esta mañana o a primera hora de la tarde”, escribió el NHC en su parte de las 12 GMT. “Todavía se prevé sea una fuerte tormenta tropical cuando llegue a las costas”, añadió
Long Island, en Nueva York, será la zona que reciba el mayor impacto de la ahora tormenta, que se espera continúe su paso hacia el norte de ese estado antes de llegar a Connecticut y otros estados de la costa noreste.
Antes de su llegada, ya Henri ha causado fuertes lluvias y tormentas eléctricas que han causado inundaciones repentinas en toda el área de la ciudad de Nueva York.