Fumio Kishida fue investido este lunes como nuevo primer ministro de Japón en una sesión parlamentaria extraordinaria tras su victoria en las primarias del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD).
El nombramiento de Kishida fue ratificado formalmente en una votación en ambas cámaras, en las que la coalición gobernante cuenta con amplia mayoría, y sucede a Yoshihide Suga, quien renunció en horas previas en bloque junto a su Gabinete tras poco más de un año al frente del Ejecutivo.
El nuevo jefe de Gobierno tiene previsto anunciar la composición de su Gobierno en las próximas horas, en el que se espera que más de una decena de carteras estén encabezadas por ministros primerizos y que mantenga puestos clave, en una búsqueda de cierta estabilidad de cara a las inminentes elecciones generales.
Kishida, descendiente de una familia política de Hiroshima, había sido electo el miércoles pasado presidente del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), venciendo al popular jefe de la campaña de vacunación, Taro Kono.
Dado que la coalición gobernante del PLD tiene una amplia mayoría legislativa, Kishida tenía asegurada la votación en el parlamento para convertirse en jefe de Gobierno de la tercera mayor economía mundial.
Antes de la votación, Kishida dijo que está listo para asumir el alto cargo.
“Creo que será un nuevo inicio en el verdadero sentido”, dijo a periodistas. “Quiero asumir retos con determinación y resolución firme ante el futuro”, agregó.