El fiscal especial Jack Smith solicitó este lunes desestimar el caso contra el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, por el asalto el Capitolio de 2021 antes de que asuma el poder el próximo 20 de enero. Lo mismo hizo con el caso por el mal manejo de documentos confidenciales tras la salida de la Casa Blanca en su primer mandato.
En un escrito judicial, Smith remarcó que Trump ganó las elecciones del pasado 5 de noviembre y que la política interna del Departamento de Justicia le prohíbe proceder con acusaciones penales contra un presidente en ejercicio.
Tras consultarlo con la Oficina de Asesoría Jurídica, Smith concluyó que «la acusación debe ser desestimada antes de que el acusado tome posesión».
La jueza que lleva el caso, Tanya Chutkan, del tribunal federal del Distrito de Columbia, concedió el pasado 8 de noviembre una pausa al caso después de que así se lo solicitara el fiscal para tener tiempo para analizar las consecuencias del resultado electoral del pasado 5 de noviembre.
Trump, que ya fue presidente entre 2017 y 2021, está acusado en el Distrito de Columbia por sus intentos para revertir los resultados de las elecciones que perdió en 2020 contra Joe Biden y por haber presuntamente instigado el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.
Documentos confidenciales
También este lunes, el fiscal especial Jack Smith solicitó desestimar el caso por el mal manejo de documentos confidenciales tras la salida de la Casa Blanca en su primer mandato.
Smith ya había dado un paso hacia atrás en este caso el pasado 13 de noviembre, cuando solicitó al Undécimo Tribunal de Apelaciones, con sede en Atlanta (Georgia), suspender la apelación que presentó contra la decisión hecha por la magistrada federal Aileen Canon, quien había desestimado la acusación contra el republicano.
El equipo del fiscal había presentado una acusación contra Trump por la retención ilegal de documentos confidenciales en Mar-a-Lago, su residencia en Palm Beach, en el sureste de Florida, tras abandonar la Casa Blanca en 2021, así como por obstrucción.
Trump se había declarado no culpable en este proceso, en el que también estaban acusados Waltine Nauta y Carlos de Oliveira, asistente personal y administrador de la propiedad de Trump en Mar-a-Lago, respectivamente.
Smith dijo hoy a la corte en su moción que debido al «principio de inmunidad» que cobija al presidente electo pone fin al caso.
Sin embargo, ha dicho a la corte que proseguirá los casos contra Nauta y Oliveira «porque, a diferencia del acusado Trump, no se les aplica ningún principio de inmunidad temporal».
Medios estadounidenses han informado de que el fiscal especial planea dimitir antes de que Trump asuma la Presidencia el próximo 20 de enero. De cualquier manera, Trump dijo durante la campaña que en su primer día como presidente despediría a Smith y ordenaría al Departamento de Justicia cerrar los casos en su contra que, según sostiene, fueron motivados por una persecución política.
La victoria electoral de Trump, quien llegó a estar imputado por cuatro casos penales, le está permitiendo despejar su horizonte judicial.
El republicano se convirtió en mayo en el único expresidente de Estados Unidos declarado culpable en un caso penal, por falsificar documentos para hacer pagos irregulares a Stormy Daniels y tapar así su aventura con la actriz porno, pero el juez aplazó la semana pasada sin fecha su sentencia.
Con información de EFE