Este viernes una emboscada en Colombia dejó siete policías muertos en el suroeste del país, es el ataque más grave cometido en el país desde la llegada a la Presidencia de Gustavo Petro, quien no dudó en considerarlo como un sabotaje a su propuesta de «paz total».
Aún se desconocen los responsables del atentado perpetrado con explosivos en la vereda de Corozal contra la unidad policial que se movilizaba en una camioneta luego de una jornada de trabajo en el caserío de San Luis, en la zona rural de Palermo, en el departamento del Huila.
El Gobierno informó inicialmente de ocho fallecidos pero posteriormente la Policía precisó en un comunicado que fueron siete, ente ellos tres auxiliares de 18, 19 y 20 años de edad que tan solo llevaban tres meses en la institución.
Las víctimas fueron los intendentes Wilson Cuéllar Losada y Luis Alberto Sabi Gutiérrez; los patrulleros Duberney Carreño Rodríguez y Jhon Fredy Bautista, y los auxiliares Santiago Gómez Endes, Arles Mauricio Pascuas y Cristian Ricardo Cubillos.
Con información de EFE
¡La Policía Nacional de los colombianos está de luto. El país está de luto!
Comunicado de prensa sobre los lamentables hechos ocurridos en el departamento de Huila, donde en un ataque repudiable fueron asesinados 7 de nuestros compañeros. ⬇️ pic.twitter.com/g6UALyXZo8
— Policía de Colombia (@PoliciaColombia) September 3, 2022