Rusia aumentó su presencia en la frontera con Ucrania con al menos “7.000 militares”, algunos de ellos llegando este miércoles, aseguró un alto funcionario de la Casa Blanca, quien calificó de “falso” el anuncio de Moscú de una retirada de fuerzas.
Moscú puede “en cualquier momento” lanzar una operación que le serviría de “pretexto falso” para invadir Ucrania, prosiguió. “Rusia dice querer encontrar una solución diplomática, pero sus acciones indican lo contrario, señaló.
Más temprano, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, dijo que no ha visto “un retiro significativo” de tropas rusas de las fronteras con Ucrania a pesar de los anuncios de Moscú.
La amenaza de Rusia “está ahí, es real”, declaró en el canal estadounidense ABC. “Lo que estamos viendo no es un retiro significativo. Por el contrario, seguimos viendo fuerzas, en particular fuerzas que serían la avanzada de una posible nueva agresión contra Ucrania, que siguen estando en la frontera”.
“No hemos visto una retirada. Nos gustaría verla. Si la vemos, la celebraremos”, insistió el secretario de Estado.
Blinken reafirmó que el presidente ruso, Vladimir Putin, “tiene la capacidad para actuar en cualquier momento. Puede apretar el gatillo, puede hacerlo hoy, puede hacerlo mañana, puede hacerlo la próxima semana”.