Un total de 90.396 venezolanos han sido acogidos en España por razones humanitarias desde 2019, cuando se empezó a aplicar este tipo de protección a estos ciudadanos latinoamericanos al entender que en su caso no se dan las condiciones para ser reconocidos como refugiados ni beneficiarios de protección subsidiaria.
Con información de EFE
Más de 5,6 millones de venezolanos han abandonado sus hogares desde que en 2014 comenzaron las protestas por la crisis económica que atravesaba el país. En marzo de 2018 la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) instó a los estados a otorgar a estos ciudadanos la protección debida porque Venezuela vivía una crisis humanitaria y no se podía devolver a nadie al país.
A raíz de esa recomendación de la ONU, el Gobierno español comenzó a aplicar la fórmula de protección por razones humanitarias para dar una respuesta adecuada y acorde con la ley de Asilo a los venezolanos que huyen de su país.
«Hasta entonces, España, con gobiernos de distinto signo, denegaba las solicitudes de protección internacional de los venezolanos», indicó la directora de Políticas y Campañas de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Paloma Favieres.
Esta fórmula, que empieza a aplicarse «partiendo de una crisis humanitaria y no de una situación política», se traduce en un permiso de residencia y trabajo por un año prorrogable para que los afectados no queden en un limbo jurídico.
Sólo hasta el 30 de septiembre de este año, se ha concedido protección por razones humanitarias a 10.230 venezolanos. El año pasado se otorgaron 44.931 autorizaciones y en 2019 se dieron 33.235 permisos de este tipo, según datos de la Oficina de Asilo y Refugio del Ministerio del Interior.
Pese a que su principal destino no es España -la mayoría de los venezolanos están en países limítrofes que han ido buscando fórmulas para darles algún estatus legal-, llevan cinco años liderando las nacionalidades que piden más protección en nuestro país.
En 2020 lo hicieron 28.375 venezolanos (un 31,94 % del total de solicitudes de protección recibidas), que supone un descenso del 30,6% de estas peticiones respecto al año anterior consecuencia del cierre de fronteras y el parón en la movilidad en todo el mundo a raíz de la pandemia. En 2019, pidieron asilo 40.886 venezolanos.
En los primeros nueve meses de 2021 han solicitado protección internacional en el territorio nacional 8.048 venezolanos, una cifra que «ha bajado mucho» porque la frontera aérea, principal vía de entrada de estos ciudadanos, ha estado prácticamente cerrada hasta julio.
«El incremento de llegadas se nota a partir de ese mes e impactará en el procedimiento en este último trimestre», avisa Favieres.