Decenas de miles de personas han protestado este viernes pacíficamente en Eslovaquia contra lo que consideran es una deriva antidemocrática y prorrusa y china del Gobierno de coalición de populistas de izquierdas y ultranacionalistas que lidera Robert Fico.
La protesta más numerosa ha tenido lugar en la capital, Bratislava, donde la Policía estimó que unas 40.000 personas se concentraron en la céntrica Plaza de la Libertad, cerca de la sede del Gobierno.
Según la emisora TA3, al menos 15.000 se manifestaron ya ayer en Kosice, la segunda ciudad del país.
El diario Sme señala que protestas similares, convocadas por diferentes organizaciones civiles bajo el lema ‘Eslovaquia es Europa’ se han celebrado en una treintena de ciudades de Eslovaquia y en el extranjero.
«He venido a Bratislava porque estoy horrorizado de adonde ha llegado Eslovaquia desde la Revolución de Terciopelo» declaró al diario SME Ján Krá, un manifestante de 52 años, en referencia a las protestas que en 1989 acabaron con la dictadura comunista en la entonces Checoslovaquia.
La eliminación de la Fiscalía anticorrupción, que investigaba a personas cercanas al Gobierno; la puesta de la televisión pública RTVS bajo el control del Ministerio de Cultura, dirigido por una ultranacionalista; o las purgas en instituciones culturales, son algunos de los motivos de las protestas.
«Es hora de que nos unamos y expresemos juntos nuestro inequívoco desacuerdo con los pasos y la dirección geopolítica del Gobierno de Robert Fico», aseguró un representante estudiantil que subió al escenario levantado en la Plaza de la Libertad, señala Sme.
Los manifestantes denuncian también la reunión el pasado diciembre en Moscú de Fico con el presidente ruso, Vladímir Putin, o su viaje a China para fortalecer vínculos económicos con ese país
Fico dirige desde octubre de 2023 una coalición en la que participa su partido, el Smer, suspendido por los socialistas europeos por coaligarse con el partido SNS.
Fue ya primer ministro entre 2006 y 2010 así como entre 2012 y 2018, cuando tuvo que dimitir ante las masivas protestas ciudadanas tras el asesinato del periodista Jan Kuciak, que investigaba vínculos del crimen organizado con el poder político.
Nada más volver al poder en 2023, su Gobierno suspendió la ayuda militar para que Ucrania se defendiera de la agresión rusa, y Fico ha dado muestras de estar más próximo al régimen de Putin que al presidente ucraniano, Volidimir Zelenski, cuya invitación para reunirse con él rechazó alegando motivos de seguridad.
El Gobierno lleva días denunciando que está en marcha una operación de desestabilización del país organizada y financiada desde el extranjero tras las protestas antigubernamentales.
De hecho, Fico ha amenazado hoy con expulsar del país en breve a «conspiradores» extranjeros.
También acusa a la oposición europeísta y liberal de haber provocado el atentado que casi le cuesta la vida en mayo del año pasado, cuando fue tiroteado por un jubilado que dijo estar en desacuerdo con sus políticas.
Fico ha reiterado hoy que «la UE y la OTAN son el espacio vital de Eslovaquia» y ha acusado a la oposición de sembrar dudas sobre esta orientación.
El primer ministro y sus colaboradores han advertido recientemente de que la Unión Europea está evolucionando y podría desaparecer como el Pacto de Varsovia, el bloque militar de países comunistas dominado por la Unión Soviética durante la Guerra Fría.EFE