El Consejo de Derechos Humanos de la ONU anunció este lunes que celebrará una sesión especial el 24 de noviembre para debatir «el deterioro de los derechos humanos en Irán», donde al menos 326 personas han muerto a manos de las fuerzas de seguridad durante las protestas tras el fallecimiento de la joven Mahsa Amini.
La sesión especial fue solicitada el pasado viernes por Alemania e Islandia y ha obtenido apoyo de 17 de los 47 países miembros del Consejo, entre ellos Argentina, México, EEUU, Francia y Reino Unido.
Otros 27 países no actualmente miembros del Consejo pero que participan en él en calidad de observadores también han mostrado su apoyo expreso a la celebración de esta sesión.
En Consejo de Derechos Humanos suele celebrar tres sesiones anuales, pero en casos de emergencia puede organizar además reuniones especiales, en las que pueden aprobarse resoluciones condenatorias o incluso misiones internacionales de investigación patrocinadas por la ONU.
La de Irán será la segunda sesión especial que se celebre este año, tras la que se convocó en mayo para analizar las violaciones de derechos humanos de Rusia durante su actual invasión a Ucrania.
Entre los 326 fallecidos por la represión de las protestas hay al menos 43 menores de edad y 25 mujeres, según el último recuento de la ONG Iran Human Rights, con sede en Oslo, que también cifra en más de 12.000 los detenidos.
Las protestas en diversas ciudades iraníes son protagonizadas sobre todo por jóvenes y mujeres al grito de «mujer, vida, libertad»; en ellas se lanzan consignas contra el Gobierno y se queman velos, uno de los símbolos de la República Islámica y algo impensable no hace mucho.
Con información de EFE