La comunidad internacional reaccionó a la victoria del controvertido Nayib Bukele en las elecciones presidenciales celebradas el domingo en El Salvador al instarlo a proteger los derechos humanos en el país centroamericano y a fortalecer los lazos económicos y de seguridad en la región.
Amnistía Internacional (AI) alzó su voz este lunes para advertir que la «crisis de derechos humanos» que vive El Salvador en el contexto del régimen de excepción vigente desde marzo de 2022 para combatir a las pandillas podría profundizarse durante el segundo mandato de Bukele, quien obtuvo una victoria aplastante en los comicios de ayer, según el escrutinio preliminar.
«Nos preocupa profundamente el deterioro en el respeto y la protección de los derechos humanos bajo el Gobierno de Nayib Bukele y la probabilidad de que esta tendencia se consolide durante su segundo mandato», señaló la directora para las Américas de AI, Ana Piquer.
A juicio de Piquer, «la comunidad internacional debe permanecer vigilante y utilizar todos los recursos y mecanismos a su disposición para detener y revertir los abusos y la violencia estatal que ponen en riesgo la situación de derechos humanos de El Salvador».
Según denuncias recabadas por organizaciones humanitarias salvadoreñas e internacionales, desde que se aprobó la suspensión de garantías constitucionales, como el derecho a la defensa, se han registrado en las cárceles más de 220 muertes de detenidos, algunos con signos de violencia o torturas.
Tras las 22 ampliaciones del régimen de excepción, el Gobierno de Bukele reporta más de 76.000 detenciones y se registran más de 6.000 denuncias de atropellos por organizaciones humanitarias.
Por ello, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, instó hoy a Bukele a «la buena gobernanza, la prosperidad económica, las garantías de juicios justos y los derechos humanos».
El triunfo del polémico empresario que, con el 70,25 % de las actas procesadas en el escrutinio preliminar del Tribunal Supremo Electoral (TSE) alcanza ya 1.662.313 votos, fue aplaudo por el Gobierno chino, un aliado estratégico del mandatario reelecto.
«Desde ya nos ponemos a disposición para fortalecer lazos de amistad y la cooperación bilateral entre ambos países», publicó la representación diplomática del gigante asiático.
Por su parte, el Gobierno de México, liderado por Andrés Manuel López Obrador, envió a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores un mensaje celebrando que la reelección se haya dado en una jornada «pacífica y democrática», al tiempo que solicitó seguir “construyendo un futuro de cooperación y desarrollo mutuo” entre ambas naciones.
El mensaje de los vecinos centroamericanos
Entretanto, los Gobiernos izquierdistas de Honduras y Guatemala, vecinos de El Salvador, saludaron a Bukele por su victoria y felicitaron al pueblo salvadoreño por manifestar su voluntad en las urnas.
«Con el mayor respeto y consideración le deseo éxitos en su nuevo mandato», escribió en X la presidenta hondureña, Xiomara Castro.
Mientras que el presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo de León, le dijo a los salvadoreños que Guatemala «les tiende la mano para avanzar en paz y desarrollo».
Algo similar expresaron los Gobiernos de Panamá y Costa Rica, que pidieron continuar “fortaleciendo los vínculos de amistad y colaboración» en el istmo.
También, desde Nicaragua Daniel Ortega, y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, abogaron por crear para Centroamérica «las condiciones de trabajo, seguridad, justicia y vida que merecemos».
La reacción del sur sin la voz de la izquierda
En el sur del continente, donde la figura de Nayib Bukele genera amores y desencuentros también se produjeron reacciones sobre su triunfo, sin que de momento se hayan pronunciado los principales Gobiernos de izquierda que son críticos a su gestión.
El Gobierno del libertario Javier Milei renovó “su compromiso de continuar trabajando en favor de los históricos lazos de amistad con El Salvador y de promover los mecanismos de cooperación existentes entre ambas naciones en los temas que componen la agenda bilateral».
En Venezuela, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) -el principal bloque opositor- le solicitó al reelecto mandatario salvadoreño que siga «acompañando al pueblo venezolano en su lucha por la libertad y la verdadera democracia en un año decisivo para el cambio político», a través de la exigencia de una elección presidencial «libre y que exprese el verdadero sentir de la ciudadanía».
Por su parte, los Gobiernos de Perú y Ecuador invitaron a Bukele a fortalecer la agenda bilateral entre El Salvador y estas naciones suramericanas.
«Ecuador y El Salvador continuarán impulsado una activa agenda bilateral de cooperación y amistad», reza un comunicado de la Cancillería de Ecuador donde su presidente, el empresario Daniel Noboa, quien asumió el cargo en noviembre pasado, ha sido comparado con Bukele.
Las similitudes entre los dos gobernantes se dan, principalmente, en lo que respecta a la política carcelaria que busca implementar el ecuatoriano con la proyectada construcción de dos modernas cárceles de máxima seguridad para aislar a los líderes de las bandas criminales, a las que ha declarado una «guerra interna». EFE