El cómico estadounidense Paul Reubens, cuyo alter ego Pee-wee Herman fue toda una sensación en la televisión y el cine durante la década de 1980, falleció este domingo en Los Ángeles a los 70 años a causa del cáncer.
«Su talento y prolífico legado vivirán para siempre en el panteón de la comedia y en nuestros corazones como un amigo entrañable», detallaron este lunes sus allegados en un comu8nicado difundido a través de los perfiles del artista en redes sociales.
El mensaje añadió que durante seis años «luchó con valentía y en privado» contra la enfermedad con la «tenacidad y el ingenio que le caracterizaban».
La publicación fue acompañada por unas últimas palabras de Reubens en las que se disculpaba por no haber hecho público que estaba enfermo y agradecía a sus seguidores su «amor y respeto».
Reubens creó el personaje de Pee-wee en 1978, cuando formaba parte del grupo cómico The Groundlings, que pronto alcanzó gran popularidad en Los Ángeles y posteriormente en el resto del país.
El programa «Late Night With David Letterman», de la NBC, fue el primer escaparate con el que comenzó a forjar en televisión la extravagante apariencia de Pee-wee, con un traje de chaqueta gris y corbatín rojo y una risa constante muy particular que deleitaba a niños y adultos.
Su personaje fue tan aclamado que desde 1984 comenzó a girar por Estados Unidos en salas tan reputadas como el Carnegie Hall de Nueva York.
Entre 1986 y 1991 presentó «Pee-wee’s Playhouse», un colorido programa infantil en el que Reubens estaba rodeado de juguetes y muebles parlantes que hacían disfrutar a niños de todo el país. Este formato se prolongó durante cinco temporadas, dejó más de 45 capítulos y se embolsó 22 premios Emmy.
Incluso protagonizó los filmes «Pee-Wee’s Big Adventure» (1985) y «Big Top Pee-wee», dirigidos por Tim Burton y Randal Kleiser, respectivamente.
Su carrera parecía no tener techo hasta que en 1991 fue detenido por «exhibicionismo indecente» al ser hallado masturbándose en un cine para adultos de Sarasota, ciudad del estado de Florida en la que se crio. Las salas X eran legales, pero el onanismo allí constituía un delito.
Después de esto, la imagen de su ficha policial y el contenido de su expediente fueron reproducidos por decenas de medios y su imagen se vio tan perjudicada que la CBS rompió su relación contractual con el artista y dejó de emitir «Pee-wee’s Playhouse».
Hasta la empresa de juguetes Toys R Us retiró los muñecos de Pee-wee de sus estanterías, en lo que suponía la consagración de la salida de Reubens de la escena pública.
Desde entonces, trató de recomponer sin éxito su carrera interpretando papeles secundarios en películas como «Batman Returns» (1992), en la serie «Buffy the Vampire Slayer» (1997) y hasta produciendo en 2015 una tercera cinta basada en su personaje favorito.
EFE