El partido Convergencia celebró este jueves su Asamblea Tricolor Nacional 2023, con la presencia de más de 500 delegados de todas las regiones del país.
Durante el acto celebrado en Caracas, la tolda tricolor conmemoró 30 años de lucha política y resistencia ante las adversidades, que se traducen en momentos históricos en los que han demostrado su compromiso con el cambio político y la democracia de Venezuela.
La actividad se desarrollo con la participación de los coordinadores regionales y delegados tricolores del país, además de importantes personalidades del ámbito político y los miembros de la dirección nacional del partido.
En ese sentido, el Coordinador Nacional General, Biagio Pilieri destacó los inicios del partido, en manos de su primer coordinador nacional, Juan José Caldera y de miles de hombres y mujeres que enarbolaron la bandera de color amarillo, verde y rojo. Así como subrayó el lema central: «Un compromiso de solidaridad, que da cuerpo, corazón y alma» a la organización partidista.
Pilieri aprovechó la oportunidad de honrar el compromiso que tiene el partido con la defensa de todos los derechos para todas las personas, en especial con los más desposeídos, «hoy más que nunca, Convergencia sigue al lado de los más vulnerables, de los que luchan, de los que cada día empujan el cambio y con los que han entendido que solo, nadie puede. Por eso, hoy desde acá, y desde cada rincón del país decimos: ¡Aquí estamos! por Venezuela».
Reconoció el determinante trabajo de cada activista, «Hoy somos una realidad palpable, de carne y hueso, con referentes políticos y sociales en 22 estados de Venezuela, en 251 municipios del país y con dirigentes en 19 naciones del mundo».
Asimismo, destacó la importancia de la elección primaria en el 2023 como herramienta articuladora para elegir un candidato o candidata unitario que dé todo para derrotar al régimen.
El encuentro tricolor concluyó con la elección de las nuevas autoridades nacionales, así como también, con la actualización y modernización de los estatutos, en medio de un esperanzador ambiente de fraternidad que unió a fundadores y nuevos activistas en la capital del país.