La Misión de Determinación de Hechos de la ONU instó este jueves a las autoridades venezolanas a respetar los derechos a la vida, la libertad y la seguridad personal de todos los venezolanos y liberar a todas aquellas personas que han sido detenidas arbitrariamente.
“Hacemos un fuerte llamamiento a las autoridades para que los derechos a manifestarse y a expresarse libremente puedan ser ejercidos sin miedo a posibles represalias. Recordamos que los cuerpos de seguridad responsables del mantenimiento del orden público deben comportarse con los más estrictos estándares internacionales en materia del uso de la fuerza”, dijo Marta Valiñas, presidenta de la Misión. “Toda conducta violatoria de derechos debe ser investigadas de manera pronta, exhaustiva e imparcial y juzgadas por tribunales independientes con pleno respeto al debido proceso.”
En su más reciente informe al Consejo de Derechos Humanos, la Misión de la ONU documentó la violenta represión contra la población civil que protestaba tras las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
Francisco Cox, experto de la Misión, alertó que el aparato represor sigue plenamente operativo. “Entre agosto y diciembre de 2024, las autoridades detuvieron a al menos 56 activistas de partidos de la oposición, a 10 periodistas y a una defensora de derechos humanos. Tanto quienes ordenen detenciones arbitrarias y la imposición de torturas u otros malos tratos como quienes las ejecuten, son responsables penalmente de forma individual«, expresó.
La Misión de la ONU reiteró su exigencia a que sean puestas en libertad todas las personas detenidas arbitrariamente y recordó la obligación del Estado de brindar una protección especial a las personas detenidas con problemas de salud, a los adultos mayores, así como considerar seriamente el interés superior de niños y niñas que aún afrontan procesos penales.
“Las personas excarceladas, incluidos niños y niñas, permanecen sometidas a medidas cautelares y a procesos por delitos graves, como terrorismo o traición a la patria”, afirmó Patricia Tappatá, experta de la Misión. “La persecución a las personas opositoras o a quienes el gobierno considera como tales, no sólo no se ha detenido, sino que ha tomado la forma de un ataque sistemático a la libertad de quienes piensan distinto.”
Finalmente, la Misión de la ONU advirtió que, conforme a su mandato, está prestando una atención especial a los sucesos del periodo anterior y posterior a la toma de posesión presidencial y que investigará los casos de violaciones graves de los derechos humanos y delitos que pudieran ocurrir, en el marco de la política de Estado de silenciamiento de la oposición, ya identificada en sus informes anteriores.