El Departamento de Justicia de Estados Unidos reveló este miércoles un complot de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC, por sus siglas en inglés) para asesinar al exasesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton.
Según documentos judiciales, a partir de octubre de 2021, el iraní Shahram Poursafi, también conocido como Mehdi Rezayi, de 45 años, intentó organizar un atentado contra Bolton, en represalia por la muerte en enero de 2020 de Qasem Soleimani, el cabecilla de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán.
De acuerdo a la acusación, Poursafi intentó pagar 300 mil dólares a individuos en los Estados Unidos para llevar a cabo el asesinato en Washington, D.C. o Maryland.
El 22 de octubre de 2021, Poursafi le pidió al Individuo A, un residente de EEUU a quien conoció previamente en línea, que tomara fotografías de Bolton, alegando que las fotografías eran para un libro que estaba escribiendo.
Posteriormente, el Individuo A le presentó a Poursafi a un asociado, que se convirtió en fuente confidencial de la Justicia estadounidense, con quien el iraní se comunicó el 9 de noviembre de 2021 por una aplicación de mensajería encriptada.
Poursafi ofreció a esta segunda persona hasta 300 mil dólares para contratar a alguien para “eliminar” al ex asesor de Seguridad Nacional. Para ello, el iraní le ordenó que abriera una cuenta de criptomonedas para facilitar el pago, pero para ello primero debería ejecutarse el asesinato.
El 14 de noviembre de 2021 Poursafi proporcionó al sujeto la dirección de trabajo del Bolton en Washington, D.C, y cinco días más tardes le dijo que no importaba cómo se llevó a cabo el asesinato, pero su “grupo” requeriría la confirmación en video de la muerte del objetivo.
El 3 de enero de 2022, Poursafi señaló al contacto que estaba bajo presión de “su gente” para completar el asesinato. Ese mismo día, Poursafi lamentó que el asesinato no se llevaría a cabo en el aniversario de la muerte de Qasem Soleimani.
“El Departamento de Justicia tiene el deber solemne de defender a nuestros ciudadanos de gobiernos hostiles que buscan herirlos o matarlos”, dijo el Fiscal General Adjunto Matthew G. Olsen de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia. “Esta no es la primera vez que descubrimos complots iraníes para vengarse de personas en suelo estadounidense y trabajaremos incansablemente para exponer e interrumpir cada uno de estos esfuerzos”.
“Irán tiene un historial de conspiración para asesinar a personas en los EEUU que considera una amenaza, pero el gobierno de los EEUU tiene un historial más largo de responsabilizar a quienes amenazan la seguridad de nuestros ciudadanos”, dijo la subdirectora ejecutiva Larissa L. Knapp del FBI.
“El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, a través del Acusado, trató de tramar un complot descarado: asesinar a un exfuncionario estadounidense en suelo estadounidense como represalia por las acciones de Estados Unidos”, dijo el fiscal federal Matthew M. Graves para el Distrito de Columbia. “Irán y otros gobiernos hostiles deben entender que la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos y nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley harán todo lo que esté a nuestro alcance para frustrar sus complots violentos y llevar a los responsables ante la justicia”.
“Un intento de asesinato de un exfuncionario del gobierno de los EE. UU. en suelo estadounidense es completamente inaceptable y no será tolerado”, dijo el subdirector a cargo Steven M. D’Antuono de la oficina local del FBI en Washington. “El FBI continuará identificando e interrumpiendo cualquier esfuerzo de Irán o cualquier gobierno hostil que busque causar daño o muerte a personas estadounidenses en el país o en el extranjero. Esto debería servir como advertencia para cualquier otra persona que intente hacer lo mismo: el FBI será implacable en nuestros esfuerzos para identificar, detener y llevar ante la justicia a quienes amenazarían a nuestra gente y violarían nuestras leyes”.