Estados Unidos está siguiendo «con gran interés» el caso del avión venezolano-iraní que está retenido en Argentina por orden judicial mientras avanzan las investigaciones sobre sus vínculos con organizaciones terroristas.
En una breve declaración suministrada a los medios de comunicación, el embajador de los Estados Unidos en la Argentina, Marc Stanley, dijo: “Seguimos con gran interés las investigaciones judiciales y policiales de la tripulación y el avión, y agradecemos los esfuerzos investigativos de las autoridades argentinas”.
Este jueves se cumplieron 11 días desde que el Boeing 747 matrícula YV3531 de Emtrasur, la filial de carga de Conviasa, llegó a la Argentina.
El avión despertó las alarmas porque hasta hace seis meses pertenecía a Mahan Air, una aerolínea iraní sancionada por Estados Unidos por ser el brazo logístico de la Guardia Revolucionaria Islámica, también conocida como las Fuerzas Quds, considerada una agrupación terrorista.
El Departamento del Tesoro incluyó en 2011 a Mahan Air en su lista de la OFAC, señalándola de transportar armas, recursos, equipamiento y personal de organizaciones terroristas como Hezbollah.