Este martes 26 de abril se cumplen cinco años del asesinato del estudiante de la Universidad Metropolitana, Juan Pablo Pernalete, quien murió al recibir el impacto de una bomba lacrimógena en su pecho, disparada por militares del régimen de Nicolás Maduro.
Tras cinco años del crimen, Elvira Llovera y José Gregorio Pernalete, padres de Juan Pablo, denuncian la denegación de justicia por parte del Estado venezolano.
En conversación con el podcast «Son Derechos» de la ONG Provea, alertaron que los responsables y la cadena de mando de los crímenes del 2017 no han sido investigados ni juzgados.
«Las investigaciones en Venezuela benefician a los victimarios y no a las víctimas”, afirmaron.
La madre del joven, que había recibido una beca por su excelencia deportiva, señaló que durante los últimos cinco años se han enfrentado a un sistema de justicia viciado, donde los han revictimizado constantemente y les han hasta cambiado reiteradamente los fiscales con la finalidad de darle más larga a la investigación.
“Hasta la fecha han sido 15 jueces quienes se han encargado de nuestro caso, comienzan desde cero, a analizar el expediente y nunca obtenemos respuesta por parte de ellos, más que excusas. A mi esposo y a mí nos han ocasionado un daño moral y psicológico, nuestro hijo nos dejó un gran legado y es nuestra motivación más grande para seguir adelante, así como todos esos jóvenes que un día salieron de su casas y más nunca regresaron”, afirmó Llovera.
Impunidad y mentiras oficiales
Ante la impunidad, la esperanza de los padres está puesta en la investigación que adelanta la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de lesa humanidad, que ha hecho que el fiscal general impuesto por la ilegítima constituyente chavista, Tarek William Saab, cambie la versión sostenida hasta ahora por el régimen, que apuntaba a que Pernalete había sido matado por infiltrados en la protesta con una pistola de perno.
En mayo de 2021, Saab, modificó su relato y admitió que el estudiante murió por el disparo de una bomba lacrimógena. “Este joven falleció tras recibir un golpe con una bomba lacrimógena en el pecho. Aquí se logró la imputación de 12 funcionarios por el delito de homicidio preterintencional en grado de complicidad correspectiva”, dijo Saab en rueda de prensa.
Sin embargo, en mayo de 2017, cuando ocupaba el cargo de Defensor del Pueblo, Saab se plegó al relato del régimen, que aseguraba que a Pernalete lo habían matado con una pistola de perno.
En una serie de mensajes en Twitter, publicados el 10 de mayo de 2017, Tarek William Saab incluyó a Pernalete en una lista de muertes causadas por supuestos “francotiradores y pistoleros infiltrados” con “armas convencionales y caseras”.
Ese mismo mes, la entonces fiscal general, Luisa Ortega Díaz, confirmó que “la muerte del estudiante se produce por un shock cardiogénico por traumatismo cerrado de tórax. Fue impactado por una bomba lacrimógena“, dijo en rueda de prensa, derrumbando la versión difundida por el régimen de Nicolás Maduro.
Meses mas tardes, luego de que el chavismo destituyera a Ortega Díaz y lo impusiera como fiscal general, Tarek William Saab dijo en entrevista con EFE que reabriría la investigación por el caso Juan Pablo Pernalete, asegurando que se alteraron pruebas durante la gestión anterior.
“¿Qué es lo que es dudoso? Aquí descubrimos que el laboratorio criminalístico de la Fiscalía se usó para alterar pruebas, eso es grave, estamos en etapa de investigación, pero eso es sumamente grave”, aseguró Saab.