La Federación Danesa de Fútbol (DBU) mostró este miércoles su «asombro» por la decisión de la FIFA de no permitir llevar al brazalete «One Love» en los partidos de Qatar 2022, y aseguró también que no apoyará la reelección de su presidente, Gianni Infantino.
Los capitanes de Países Bajos, Inglaterra, Alemania, Dinamarca, Suiza y Gales pretendía portar el brazalete multicolor en sus partidos del Mundial, pero se echaron atrás al comunicar la FIFA la imposición de sanciones deportivas.
«La FIFA pidió el día 21 una reunión de urgencia para discutir el caso. Fue al hotel de Inglaterra y dejó claro que habría sanciones deportivas si alguien portaba el brazalete, como mínimo recibiría una tarjeta amarilla», dijo en rueda de prensa en Doha el presidente de la DBU, Jesper Møller.
Møller, que mantuvo ayer una reunión con Infantino con motivo del debut de Dinamarca contra Túnez, criticó la medida de FIFA y anunció una respuesta colectiva.
«Nos vemos obligados a reaccionar a esto. Lo haremos junto con los otros países, estamos juntos en esto. Estamos asombrados de que no podamos usar ese brazalete», dijo el presidente de la DBU, que se mostró «decepcionado» y «enfadado» y dijo no haber vivido antes «algo semejante».
Jesper Møller reveló también que Dinamarca no apoyará la reelección de Infantino en el próximo congreso de la FIFA en marzo de 2023.
«Hay 211 países en la FIFA, Infantino tiene una declaración de apoyo de 207, pero Dinamarca no es uno de ellos. No vamos a apoyar a Infantino», afirmó.
Jesper Møller insistió en la necesidad de «cambios» en la FIFA y aceptó como una posibilidad «hipotética» que Dinamarca pudiese salirse de esta organización si no ocurre nada.
El máximo responsable de selecciones de la DBU, Peter Møller, calificó en la misma comparecencia de «insólito» la presión que la FIFA ha puesto sobre los jugadores y criticó los métodos «al estilo matón» usados por esta organización.
Con información de EFE