Cristiano Ronaldo se apuntó un nuevo hito en su carrera. Con los dos goles que anotó para la Juventus frente a Udinese, alcanzó los 758 oficiales en su carrera (en 1035 participaciones oficiales), uno más que la cifra que ostenta el brasileño Pelé (en 815 cotejos).
A los 30 minutos de juego del cotejo por la Serie A de Italia, el luso recibió de Ramsey, que robó la pelota en campo contrario, y aceleró hacia el área. Penetró de derecha al centro y sacó un remate cruzado, inatajable, para escribir otra página dorada. El argentino Paulo Dybala fue el primero en acercarse a felicitarlo por igualar a O Rei. Pero CR7 no se quedó allí. A los 69 minutos lo habilitó el uruguayo Rodrigo Betancur, se marchó mano a mano y resolvió de zurda.
El flamante récord abrió la polémica. ¿Quién es el máximo anotador de la historia?
Forma parte del debate para el revisionismo histórico sobre quiénes son los top scorers desde que existe registro a nivel mundial. Mientras algunos conteos indican que ahora CR7 es el máximos artillero, otros colocan un escalón arriba a Romario, con 772 en 994 oficiales. Y el sitio estadístico Rssf , uno de los más confiables, señala que el hombre con más goles registrados es el austríaco Josef Bican, a quien le contabilizaron 805 tantos entre 1931 y 1955. Independientemente de esta situación, el portugués a los 35 años, sigue sumando gritos que le permitirán en el corto plazo romper todos los récords. De hecho, quedó a 48 conquistas del ex Slavia Praga. Y si desea, como enunció en más de una oportunidad, brillar hasta los 40 años en los estadios europeos.
Bican
La cifra de Bican la avala la propia FIFA, entidad que en septiembre del 2020 publicó una nota donde identificó 805 goles de Bican en 530 partidos. Es más, en ese mismo informe cotejan los datos de Pelé extraoficiales y marcan una teoría sobre Pepi Bican: “Ni siquiera O Rei Pelé, que reivindica haber metido 1.283 goles, lo hizo mejor. El mítico brasileño incluye en su total los goles marcados en partidos no oficiales, y si hacemos lo mismo con Bican, su cosecha se estima en 1.468 tantos, aunque esas cifras son difíciles de verificar habida cuenta de su antigüedad”.
De familia de origen checo, Bican nació en Viena el 25 de septiembre de 1913. Se caracterizaba por su velocidad. Marcaba 10,8 segundos en 100 metros, cuando en los Juegos Olímpicos de Berlín, en 1936, Jesse Owens consiguió el récord y ganó la medalla dorada en esa especialidad con 10,3 segundos.
Bican fue goleador en todos los equipos que jugó (Rapid, entre 1931-1935), Admira Viena (1935-1937), Slavia Praga (1937-1949), Viktovické Zelezarny (1949-1951), Skoda Hradec Kralové (1951-1953) y Dynamo Praga (1953-1955). Al colgar los botines volvió a ser obrero, conductor de autobuses y hasta alimentó a los animales en el zoológico de Praga.
Existe otro nombre en danza, aunque las cifras son más complejas de ratificar. Se trata del brasileño Arthur Friedenreich, quien entre 1909 y 1935 convirtió, según algunos estudiosos, 1.239 goles pero la IFFHS le reconoce 354 en 323 partidos oficiales en Primera División, aunque en 1962, el estudioso Mario de Andrade dijo tener todas las fichas de los goles y siempre sostuvo que fueron 1.239 en 1.329 partidos, aunque el periodista De Vaney lo corrigió y dijo que en verdad eran 1.329 en 1.239 partidos, según se publicó en el libro Los gigantes del fútbol de Brasil, de Juan Marcos y Max de Castro en 1965.
Más allá de la polémica, Cristiano ya se ganó un sitial destacado en la historia del fútbol mundial. De hecho, France Football, la revista que entrega el Balón de Oro, lo ubicó en el equipo titular de las leyendas, el Balón de Oro Dream Team. Y si Bican es quien está sentado en el trono de los máximos anotadores de la historia, pues bien, ya lo estará apuntando con el rayo láser, como próxima misión a concretar.