Era un duelo inédito en el torneo masculino de fútbol, aunque ambos perseguían el mismo objetivo: sumar su segundo título. Y fue para Brasil, que se quedó otra vez con la medalla de oro de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Logró retener el título que había logrado en Río 2016, lo consiguió al imponerse a España por 2-1 en el Nissan Stadium de Yokohama.
Con información de INFOBAE
Ambos equipo necesitaron de prórrogas para sortear las semifinales y también tuvieron que llevar la definición hasta las últimas instancias. Fue la Canarinha la que logró marcharse al descanso en ventaja en un primer tiempo en el que España también contó con posibilidades claras. De hecho, Diego Carlos salvó un balón sobre la línea de gol para evitar la apertura del marcador de La Roja en el minuto 16.
Parecía que la primera mitad finalizaría con el marcador estático, incluso porque Richarlison falló un penal el minuto 37 con un remate muy potente que terminó en la grada, pero el 1-0 llegó en los minutos de descuento con un balón al área que despejó la zaga de España en primera instancia pero que luego Matheus Cunha anotó de volea ante Unai Simón.
De cara al complemento, Marco Asensio le dejó su lugar en la cancha a Bryan Gil y el equipo olímpico español fue en busca de la igualdad. Un gol que llegó en el minuto 61, con toda España dentro del área rival y con Mikel Oyarzabal definiendo con un remate fulminante tras un buen centro de Óscar Gil desde la banda derecha.
Tras dos remates españoles sobre el final del partido que dieron en el travesaño, el encuentro se fue al tiempo extra. Y ahí Brasil demostró sus ganas de volver a quedarse con la medalla de oro y tuvo su recompensa con un contraataque letal en el segundo tiempo de la prórroga.
En el minuto 108 de juego, un pase en largo de Nino encontró a Malcom (había ingresado en lugar de Cunha), quien le ganó la acción a Jesús Vallejo y se definió ante la salida de Simón para establecer el 2-1 definitivo. Es la segunda presea dorada en la historia del fútbol brasileño en su tercera final consecutiva, ya que la perdió la definición ante México en Londres 2012 y le ganó a Alemania en su propia casa cuatro años después.
Uno de las pilares en la consagración ha sido Dani Alves, quien a sus 38 años ha sumado título número 43 en su carrera profesional y sigue agigantando su leyenda como el futbolista más laureado de todos los tiempos. A sus ligas de España, Italia y Francia, y sus títulos de Champions League, Mundial de Clubes, Copa Confederaciones y Copa América, ahora también suma una medalla de oro.
Por su parte, España jugaba su primera final en 21 años y se ha quedado con la medalla de plata, tal como aquella vez que perdió frente a la Camerún de Samuel Eto’o en penales en Sydney 2000. Su único oro lo ganó al derrotar a Polonia en Barcelona 1992.