Los laboratorios Pfizer y BioNTech anunciaron en conjunto que buscarían la autorización regulatoria para una tercera dosis de su vacuna contra el covid-19.
“Las empresas esperan publicar datos más definitivos pronto, así como en una revista revisada por pares, y planean enviar los datos a la FDA [agencia estadounidense de Alimentos y Drogas], a la EMA [Agencia Europea de Medicamentos] y otras autoridades reguladoras en las próximas semanas”, indicó un comunicado.
En un comunicado, ambas compañías expresaron su creencia de que una tercera inyección de su actual vacuna, que requiere dos dosis, tiene el potencial de mantener los “niveles más elevados” de protección contra todas la variantes actuales, incluida la delta.
El anuncio llega luego de que datos de una prueba en desarrollo mostró que una tercera dosis incrementa los niveles de anticuerpos de cinco a diez veces más contra la cepa original del coronavirus y la variante Beta, hallada por primera vez en Sudáfrica, en comparación con las dos primeras dosis, según el texto.
Sin embargo, apuntaron que se mantienen vigilantes y que desarrollan una versión actualizada de la vacuna. “Como se ve en las evidencias del mundo real publicadas por el Ministerio de Salud de Israel, la eficacia de la vacuna ha disminuido seis meses después de la vacunación, al mismo tiempo que la variante delta se está convirtiendo en la dominante en ese país”, dijeron las compañías en un comunicado recogido por varios medios locales.
Las farmacéuticas apuntaron que los hallazgos en Israel son consistentes con los estudios realizados por las compañías que ya informaron con anterioridad de que podría ser necesaria una tercera dosis de la vacuna transcurridos entre seis y doce meses del segundo pinchazo.
El director científico de la farmacéutica, Mikael Dolsten, dijo que la caída reportada recientemente en la efectividad de la vacuna en Israel se debió principalmente a infecciones en personas que habían sido vacunadas en enero o febrero. El Ministerio de Salud israelí dijo que la eficacia de la vacuna en la prevención de infecciones y la enfermedad sintomática cayó al 64% en junio.
“La vacuna Pfizer es muy activa contra la variante Delta”, dijo Dolsten en una entrevista. Pero después de seis meses, destacó, “es probable que exista el riesgo de reinfección porque los anticuerpos, como se predijo, disminuyen”.
Desde Pfizer hicieron hincapié en que datos de Israel y Gran Bretaña sugieren que incluso con niveles decrecientes de anticuerpos, la vacuna sigue siendo alrededor del 95% eficaz contra una enfermedad grave.
Según la nota, los ensayos clínicos podrían arrancar en agosto, si cuentan con los permisos de las autoridades competentes.
La variante delta, que es la que más preocupa a la OMS, se identificó en siete países nuevos en la última semana y ya supera el centenar. En Estados Unidos ya representa más del 50 % de las muestras secuenciadas.
El principal epidemiólogo del Gobierno estadounidense, Anthony Fauci, señaló este jueves que las tres vacunas aprobadas en EEUU contra la covid-19 -Pfizer, Moderna y Johnson&Johnson– “son efectivas contra la variante delta” según los primeros estudios sobre su efectividad contra esta nueva variación.
Con información de AFP / EFE