El primer ministro británico, Boris Johnson, defendió este martes su plan de restricciones de tres niveles para contener el Covid-19 al afirmar que el Reino Unido no puede «relajarse» a la espera de que llegue la vacuna.
Johnson abrió el debate en la Cámara de los Comunes (baja) antes de que los diputados voten este martes las distintas restricciones que se aplicarán en Inglaterra a partir de este miércoles, una vez que termine el confinamiento impuesto el 5 de noviembre.
Con base a ese plan de tres niveles, medio, alto y muy alto, el 99 % de Inglaterra estará sujeto a los dos máximos grados de alerta, a fin de contener la propagación del coronavirus.
La oposición laborista entre tanto, anticipó que se abstendrá en la votación y algunos diputados conservadores amenazan con hacerlo en contra, en descontento con las diferentes medidas que se aplicarán en distintas áreas, con consecuencias económicas para la población.
EFE